Los edemas en el embarazo son una de las dolencias más frecuentes, especialmente durante el tercer trimestre. A pesar de que en el embarazo, en principio, no suele ser peligroso ni revestir mayor gravedad, en algunos casos pueden desembocar en ciertas complicaciones más graves. Para que te quedes tranquila, te contamos todo lo que debes saber sobre las complicaciones de los edemas en el embarazo.
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Las piernas hinchadas en el embarazo
¿Sabes por qué tienes las piernas hinchadas en el embarazo? La explicación la encontrarás en los edemas o en la hinchazón producida debido al exceso de líquido en los tejidos.
Esta retención de líquidos está motivada por diversos factores. Los cambios hormonales propios del embarazo, la presión ejercida por el aumento de tamaño de tu útero o el aumento del volumen de sangre en tu organismo, son algunos de ellos.
Por esa razón, la aparición de edemas suele darse con más frecuencia durante el tercer trimestre. Esta condición puede ser particularmente severa en mujeres con embarazo múltiple o que tienen exceso de flujo amniótico.
Seguramente habrás notado que el edema empeora al final del día y con las temperaturas elevadas, que hace que tus vasos sanguíneos se dilaten y la elasticidad de sus paredes sea menor.
Como decíamos, los edemas suelen provocar diversos efectos en tu organismo, que en principio no suelen ser graves. Sólo en algunas mujeres embarazadas, este edema es grave, pudiendo provocar consecuencias más graves. Sigue leyendo para saber más acerca de las complicaciones de los edemas en el embarazo.
Cuando el edema es en las manos...
A pesar de que las piernas hinchadas en el embarazo es el principal signo de edema, éste también puede producirse en otras partes de tu organismo, como las manos
En este caso, puede ser que a causa de la hinchazón, se compriman sus articulaciones dando lugar al síndrome del túnel carpiano. Esto te provocará dolor y adormecimiento en tus manos. Para aliviar las molestias en el embarazo puedes realizar algunos ejercicios.
Si el edema es en los ojos...
Cuando el edema es en los ojos... la cosa se complica, ya que puedes sufrir de visión borrosa y sentirte limitada en muchas de tus actividades.
Cuando el edema es generalizado...
Si sufres de un edema generalizado e importante, que se extiende por la cara, el cuello, y las manos, y no disminuye de ninguna manera, deberás acudir enseguida a tu médico. Hazlo también si además sufres de dolores de cabeza, zumbidos en los oídos, o mareos.
Es importante que lo hagas porque un edema en el embarazo tan importante puede ser inicio de una enfermedad renal con consecuencias más graves, como la preeclampsia o tensión alta inducida por el embarazo.
Conoce toda la información sobre el tratamiento de los edemas en el embarazo y recuerda que con esta situación es necesaria la atención médica de urgencia, ya que puede afectar seriamente tanto a la futura mamá como al bebé.
¿Cómo prevenir los edemas en el embarazo?
Son muchas las maneras que tienes para prevenir los edemas en el embarazo, y especialmente para prevenir el edema de las piernas en el embarazo.
- Mantén un estilo de vida saludable
Una buena manera de prevenir las piernas hinchadas en el embarazo es manteniendo un estilo de vida saludable.
Deberás cuidar tu alimentación, optando por los alimentos saludables que te aportes todas las vitaminas y nutrientes que necesitas. Evita las comidas grasas, saladas o muy condimentadas, que además de provocar digestiones más pesadas, también son favorecedoras de los edemas.
Realiza algún ejercicio físico suave que mejorará la circulación sanguínea en tus piernas. ¡Caminar es siempre una buena opción!
- Masajea tus piernas
Puedes tomar como costumbre diaria, realizar un masaje ascendente en tus piernas, que te ayudará a mejorar el retorno venoso y a reducir la acumulación de líquidos.
- Arriba las piernas
Tanto los ratos que estés sentada como acostada en la cama, intenta tener las piernas un poco elevadas. Esta posición mejorará la circulación sanguínea y notarás que tus piernas ya no son tan pesadas.
Ah! Y además recuerda dormir mejor sobre el costado izquierdo, para no presionar la vena que transporta la sangre desde los miembros inferiores hasta el corazón.
Como ves, puedes seguir nuestras recomendaciones que te ayudarán a prevenir las complicaciones de los edemas en el embarazo. Piensa, además, que en cuanto nazca tu bebé, todo volverá a la normalidad.
