Algunas mujeres sufren pérdidas durante los primeros meses de embarazo, cuya aparición puede deberse a diversos motivos, bien por problemas menores o bien por una complicación grave. Si sufres sangrado ligero en el primer mes de embarazo, es importante que aprendas a reconocerlo rápidamente ya que, dependiendo del color y la cantidad, podría tratarse de un problema preocupante, especialmente si el manchado viene acompañado de dolor abdominal o fiebre alta. A continuación, vamos a explicarte por qué se producen pérdidas de sangre en el primer trimestre de embarazo y si es normal sangrar en el primer mes de embarazo. Tenerlas no significa perder el embarazo, aunque sí es recomendable acudir al médico inmediatamente si las sufres y seguir al pie de la letra sus indicaciones y recomendaciones.
Las causas del sangrado ligero en el primer mes de embarazo pueden ser, entre otras, la implantación del embrión, que se produce entre la cuarta y la sexta semana de embarazo; un embarazo ectópico o extrauterino; un aborto espontáneo; un hematoma uterino o, lo más frecuente, los intensos cambios hormonales que se producen en tu cuerpo en las primeras semanas de embarazo. Por todo ello, es importante controlar los sangrados en el embarazo, dado que pueden tener más importancia de la que pensamos.
El manchado leve es frecuente a principio del embarazo, especialmente durante el primer mes. Sin embargo, es importante acudir al médico si el sangrado es abundante y viene acompañado de dolor abdominal, mareos o fiebre alta.