Si algo se debe tener claro, es que durante los meses del embarazo es necesario llevar una buena higiene del cuerpo y evitar la entrada de posibles agentes externos por cualquier vía. Esta semana nos gustaría aclarar si es conveniente el uso de piercings en el embarazo. ¿Nos acompañas?
Lo primero respecto a este tema es que si no sabes qué puede ocurrir al realizarte un tatuaje o un piercing durante el embarazo o la reacción que puede tener en el cuerpo, la mejor opción es retrasarlo para cuando ya se haya dado a luz.
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Pero no siempre se trata de realizarse un piercing en el embarazo, ya que en la mayoría de ocasiones las futuras madres ya lo llevan puesto, por lo que deben conocer las medidas de higiene que deben respetar durante el embarazo para evitar infecciones, sobre todo si el piercing se encuentra en el ombligo.
El embarazo y el piercing en el ombligo
El ombligo es uno de los lugares del cuerpo de la mujer más sensibles durante los 9 meses, y es que este debe ser cuidado para evitar un posible contagio de infección con el bebé.
El problema principal es que la tripa de la madre aumenta mucho las dimensiones y, por lo tanto, se puede ver afectada la piel como consecuencia de la presencia de un piercing en el ombligo, aumentando también el tamaño de la perforación.
Durante la gestación es conveniente retirar el piercing del ombligo ya que puede resultar una molestia mientras la tripa va aumentando de tamaño, además de que puede suponer un foco de infecciones.
Para evitar una posible cicatriz en el ombligo durante el embarazo, se puede optar por adquirir uno de mayor tamaño o directamente retirarlo para evitar posibles problemas.
Existen piercings para embarazadas que tienen una forma especial.
Si es necesaria una buena higiene en el piercing del ombligo de forma habitual, cuando una mujer está esperando un bebé, debe controlarlo más a menudo y evitar que la suciedad o los microorganismos se incrusten y puedan provocar infecciones.
Ya que un piercing del ombligo infectado puede ser un auténtico riesgo para la madre y el bebé.
¿Cuánto tarda en cerrarse el piercing del ombligo?
Te estarás preguntando que, quizás, si eliminas el piercing del ombligo durante los meses del embarazo para evitar molestias, puedes volver a ponértelo cuando hayas dado a luz.
Si te lo quitas, es posible que notes como a las pocas semanas el agujero se cierra, pero si lo has llevado durante mucho tiempo (más de un año) no estará cerrado completamente.
Es por ello que, esperando a que tu tripa vuelva un poco a su forma natural tras el parto, puedes intentar con delicadeza que el piercing vuelva a pasar por el agujero.
Si notas que le puede costar o no te atreves puedes ponerte en manos de profesionales, ya que el dolor será mucho inferior a cuando te lo hiciste por primera vez, y es que el agujero no se encuentra completamente cerrado.
El piercing en el pezón durante el embarazo
No existe un riesgo determinado en llevar un piercing en el pezón durante el embarazo, pero sí que puede suponer problemas, sobre todo de malestar en la madre al llevarlo, ya que el pezón va cambiando de dimensiones e incrementando su sensibilidad conforme va avanzando el embarazo.
El piercing en el pezón durante el embarazo puede resultar molesto por el aumento de la sensibilidad de la zona, además de que no está recomendado durante la lactancia
Además, los pechos son una zona muy sensible durante los meses de gestación y el piercing puede resultar una molestia.
Por otra parte, si la madre tiene pensado dar el pecho a su bebé deberá retirar el piercing del pezón cuanto antes, ya que puede suponer una fuente de infecciones tanto para el bebé como para la madre.
Es por ello que los piercings en el embarazo es conveniente retirarlos y, si la madre lo desea, volverlos a poner posteriormente.
