El estreñimiento es una de las molestias más comunes del embarazo. Aunque no lo hayas sufriado anteriormente, puede que tengas episodios frecuentes de estreñimiento durante tu embarazo. Llevar una dieta adecuada y equilibrada, y practicar ejercicio físico de manera regular te ayudarán a mantener el ritmo intestinal durante los nueve meses de gestación.
El estreñimiento suele aparecer entre el tercer y el cuarto mes de embarazo a causa de los cambios hormonales y es importante tomar medidas una vez notas los primeros síntomas. Durante el embarazo tu cuerpo segrega la hormona progesterona, la cual frena el movimiento muscular y provoca la disminución de la frecuencia de las deposiciones en el embarazo.
Posibles causas del Estreñimiento en el embarazo
¿Por qué el
embarazo causa estreñimiento? A continuación, te explicamos las posibles
causas de la constipación en el embarazo:
- Cambios hormonales
- Falta de fibra en la dieta
- Falta de actividad física
- Consumo de ciertos medicamentos
Advertencia
No debes automedicarte con laxantes o hierbas medicinales durante el embarazo, ya que algunos de estos remedios pueden dañar a tu bebé o causar un parto prematuro. Consulta con tu médico para saber qué tratamiento para el estreñimiento debes seguir, de acuerdo a tu organismo y al estado de tu gestación.
Tratamientos para prevenir el Estreñimiento
Aunque la
constipación puede tratarse con remedios naturales, como ejercicios o infusiones, puede que tu médico te recete un
tratamiento específico para tu estreñimiento. En ningún caso deberás automedicarte, ya que podrías poner en riesgo tu salud y la de tu bebé.
prevenir el Estreñimiento de forma natural
Remedios para prevenir el Estreñimiento en el embarazo
Existen muchos remedios naturales para tratar el estreñimiento. A continuación, te damos unos trucos para aliviar el estreñimiento en el embarazo:
Toma hortalizas frescas y frutas con piel. Lávalas a conciencia antes de consumirlas.
Come cereales integrales a diario y legumbres dos o tres veces por semana.
Cocina los alimentos con técnicas ligeras: al vapor, a la plancha o al horno.
Evita las frituras y rebozados.
Bebe al menos 2 litros de agua al día para evitar la retención de líquidos y poner en marcha el tránsito intestinal.