Los estrógenos son la principal hormona de la reproducción y son fundamentales para la fertilidad y la fecundación de la mujer. Aunque se deben de tener controlados los niveles de estrógenos en el cuerpo. Ya que un exceso puede tener repercusiones negativas para el bebé.

Estas hormonas son las encargadas de que, llegada a la adolescencia, se produzcan los cambios en las mujeres y su cuerpo empiece a variar para convertirse en el de una mujer.

Los cambios hormonales del embarazo son muchos y cada uno de ellos, tiene una función. Repasa una a una las alteraciones hormonales y cuándo actúa cada una.

Estrógenos bajos y fertilidad

El momento en que los estrógenos se encuentran en sus niveles más bajos es durante el primer día de período pero no por ello debemos pensar que ese día la mujer no se encuentra fértil. 

Recuerda que es durante todo el ciclo menstrual cuando puedes concebir un hijo, no tan sólo los días que está ovulando.

El exceso de estrógenos en el embarazo

Existen alimentos que tienen un nivel superior de estrógenos, como pueden ser la soja, las cerezas, manzanas, apio, almendras y la avena.

Estos alimentos deben ser controlados durante los meses de gestación, debido a un aumento excesivo de los niveles de estrógenos puede elevar el riesgo de padecer cáncer de mama en las tres generaciones siguientes.

Por ello, existen los alimentos que aumentan los niveles de estrógenos, están los que disminuyen estos niveles y con los que se pueden equilibrar. Estos alimentos son los melones, los cítricos, el arroz blanco y la harina blanca. Productos totalmente naturales que ejercen el efecto contrario.

Y, aunque los estrógenos son necesarios, dado que su tarea principal es ocuparse de que el útero acoja correctamente al feto en su interior durante 9 meses para posteriormente permitirle al bebé salir con menos problemas al exterior, se deben controlar sus niveles. Al igual que con el resto de elementos durante el embarazo, para lograr un embarazo saludable, feliz y sin complicaciones.