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Como estás embarazada, la fiebre tendrá un tratamiento especial. El primer punto: Es olvidarte de tomar medicamentos para aliviar sus síntomas, ya que podrían afectar negativamente el desarrollo de tu futuro bebé.

Pero entonces, ¿cómo debes curarte? Lo recomendable es tratarte con remedios caseros. Por ejemplo, puedes remojar dos calcetines y dos trapos limpios en una mezcla de 1 cucharada de vinagre de sidra de manzana y una taza de agua.

Luego, pon los calcetines en los pies y los trapos alrededor de tus muñecas. Te reducirá la fiebre en cuestión de minutos. Puedes repetir el procedimiento hasta que te sientas mejor.

También no te olvides de la hidratación y el reposo. Aumenta el consumo de líquidos a través de zumos, especialmente de cítricos, ya que te aportará vitamina C, ideal para llevar mejor estos síntomas.

Otra opción son los caldos de verduras. Tomarlo caliente, te ayudará a bajar los síntomas de la fiebre.