A grandes rasgos existen a dos formas de dar a luz llegado el momento del parto: el parto natural o la cesárea. Por un lado, tenemos el parto natural, que se trata del parto a término mediante la dilatación del cuello uterino por el que sale el bebé tras un período de dilataciones y trabajo por parte de la madre. Por otro lado, existe la cesárea. La cesárea es una intervención quirúrgica mediante la cual se extrae al feto del vientre de la madre.  Pero cuando hablamos de cesárea, debemos tener en cuenta que existen dos tipos de cesáreas y que existen diferencias entre estos dos tipos: cesárea programada y cesárea de urgencias.

Diferencias destacables entre la cesárea programada y la cesárea de emergencias

Para que conozcáis mejor cada tipo de parto, os dejamos a continuación las principales diferencias entre las cesáreas programadas y las cesáreas de urgencia durante el trabajo del parto.

La principal diferencia es que la cesárea de urgencias, como bien indica su nombre, no está planeada. Esta cesárea se realiza en mujeres cuyo parto natural o vaginal tiene algún tipo de complicación. Así, mediante este procedimiento quirúrgico, se asegura que el bebé llega al mundo sano y se evitan riesgos.

Es importante saber que existen diferentes grados que clasifican al gravedad de la cesárea de urgencias. Normalmente, se acude a la cesárea de emergencias cuando el bebé tiene una falta de oxígeno, cuando se da una hemorragia genital y cuando la presión arterial se ve alterada. Existen otras causas, pero estas son las más comunes.

De esta misma manera, es fácil intuir que la cesárea programada consiste en una cesárea que se planea. Esta programación puede darse debido a que haya razones médicas que den lugar a esta elección para evitar así posibles daños tanto en el bebé como en la madre. Cuando existe esta posibilidad, se puede programar con semanas e, incluso, meses de antelación para que así esté todo preparado para la intervención.

La cesárea se suele programar si se dan los siguientes casos:

• Se trata de un embarazo múltiple.
• Si la embarazada tiene más de 35 años o menos de 14 años.
• La postura del bebé es inoportuna.
• Si la madre sufre afecciones del tipo diabetes o hipertensión arterial.
• El bebé mide más que el hueso de la pelvis de la madre.
• Si se da un prolapso del cordón umbilical. Es decir, si el cordón asoma por la vagina antes que el propio bebé.
• La madre padece algún tipo de infección en sus partes. Así se evita una posible infección.

Por otro lado, son muchas las mujeres que programan su cesárea la cuál se denomina cesárea electiva a través de un centro de salud o de un hospital privado porque no quieren pasar por el trabajo del parto, por ejemplo.

Es cierto que existen estas dos posibilidades en cuanto a la cesárea. Pero también es cierto que todas las futuras mamás deben saber un poco sobre este tema. Ya que, aunque tengan planeado dar a luz mediante un parto natural, puede darse cualquier tipo de imprevisto o de complicación que conlleve a la realización de una cesárea de urgencias. Por cosas como esa es muy importante estar informada del mayor número de cosas posibles relacionadas con el embarazo

Así, si decides dar a luz de forma natural y, finalmente, acabas dando a luz mediante una cesárea de urgencias o tienes pensado tener una cesárea programada, estarás informada en todo momento sobre las diferencias que existen en ambos tipos.