La higiene en el embarazo es un acto fundamental para tener una gestación saludable. La ducha es ese momento del día en el que no solo limpias tu cuerpo, sino también lo relajas. Puedes elegir entre una ducha estimulante al comenzar el día o un baño desestresante de noche. Como tú prefieras. Estas son las pautas para ducharte en el embarazo o bañarte y disfrutar de todos sus beneficios.

Beneficios de la ducha en el embarazo

La ducha puede ser muy beneficiosa para tu embarazo. Dependiendo del momento obtendrás unas u otras ventajas:

• Uno de los beneficios de la ducha en el embarazo es que activar tu cuerpo, y te ayuda a combatir la vida sedentaria a prepararlo para el día.
• Relajarte para ayudarte a dormir en el embarazo dado que tiene un efecto antiestrés.
• También la ducha permite que tus músculos estén menos tensos.
• Reduce los dolores y el cansancio.
• Otra de las ventajas de ducharte embarazada es que mejora la circulación y por lo tanto reduce la retención de líquidos, una molestia muy habitual.

Sigue estos pasos para ducharte embarazada:

1. Alterna chorros de agua fría y caliente evitando la zona del abdomen.
2. Aprovecha en el embarazo para darte chorros directamente sobre las zonas doloridas como los riñones, el cuello o las piernas.
3. No te duches con el agua por encima de los 37 grados. Ducharse con una temperatura por encima de la temperatura corporal puede afectar a la tensión arterial.

¿Cómo darse un baño en el embarazo?

Los beneficios de los baños en el embarazo son múltiples. Se trata de todo un placer que te ayudará a sobrellevar mejor las incomodidades propias del estado de gestación. Llena la bañera con agua a una temperatura de unos 34 grados. Hazlo siempre que tengas a alguien que te ayude tanto a entrar como a salir del baño. No estés más de una hora a remojo o podrías fomentar la aparición de infecciones.

Los riesgos de darse un baño embarazada son que a partir del octavo mes de embarazo los baños podrían causar una infección vaginal, por ello es mejor evítarlos.

No olvides a la hora de ducharte en el embarazo o darte un baño secarte bien e hidratar la piel para evitar las estrías o olas varices propias de la gestación.