El sedentarismo, cuando estamos embarazadas, puede ser perjudicial para nuestra salud y derivar en serios problemas como la depresión o la diabetes gestacional, por ello en este post queremos darte algunos consejos para evitar la vida sedentaria en el embarazo.
Aunque no se recomienda realizar muchos esfuerzos en el embarazo, lo cierto es que declinarse por no hacer absolutamente nada, tampoco nos ayuda en el embarazo.
Cuando conocemos que estamos embarazadas, lo más importante es concienciarse, saber qué cosas podemos hacer, y que otras no, e intentar llevar un ritmo de vida normal, con una rutina activa y hacer ejercicio adaptado a tu nuevo estado.
Los efectos del sedentarismo en el embarazo pueden ser muy perjudiciales si no somos conscientes de ello. Pasarse todos los días en continuo reposo, haciendo el mínimo esfuerzo no es la solución para evitar que tengamos algún tropiezo embarazada o cojamos más peso del debido.
Si, de manera continua, durante los meses de gestación, llevamos una vida sedentaria, nuestra salud puede derivar en problemas de depresión. Según una investigación realizada por la Universidad de Warwick ,Inglaterra, han llegado a la conclusión de la relación directa que existe entre el sedentarismo y la depresión.
Ya que es una etapa donde se producen muchos cambios, tanto mentales como físicos, en el embarazo debemos estar muy alertas y llevar cada periodo de la mejor manera posible. Así evitaremos, en este caso, afecciones mentales como la tristeza generalizada durante el embarazo.
Además, el sedentarismo no solo nos afecta psicológicamente, sino también presenta una mayor incidencia en nuestro peso, derivando en una diabetes gestacional en muchos casos. Estando embarazadas, somos más proclives a pasar más tiempo sentadas por la carga que tenemos extra en nuestros cuerpos, pero si pasamos demasiado tiempo descansando, los problemas pueden ser nefastos.
Fatigas, calambres, retención de líquidos, dolores articulares, problemas de circulación en las piernas, estreñimiento, varices o hemorroides, son otras molestias que se maximizan al adoptar el sedentarismo como modo de vida durante el embarazo.
Una vida monótona y con largos periodos de tiempo prolongados sin actividad física nos puede derivar en serios problemas, por ello es recomendable saber cómo evitar la vida sedentaria en el embarazo.
Además, tendrás mejor ánimo, más confianza en ti misma y seguridad, lo que evita la depresión posparto y un posible debilita mente mental. El cerebro descarga con el deporte endorfinas, provocando un bienestar completo en la gestante y, eso te ayudará a dormir mejor y relajarte cuando debas hacerlo.
El sedentarismo, cuando estamos embarazadas, puede ser perjudicial para nuestra salud y derivar en serios problemas como la depresión o la diabetes gestacional, por ello en este post queremos darte algunos consejos para evitar la vida sedentaria en el embarazo.
Aunque no se recomienda realizar muchos esfuerzos en el embarazo, lo cierto es que declinarse por no hacer absolutamente nada, tampoco nos ayuda en el embarazo.
Cuando conocemos que estamos embarazadas, lo más importante es concienciarse, saber qué cosas podemos hacer, y que otras no, e intentar llevar un ritmo de vida normal, con una rutina activa y hacer ejercicio adaptado a tu nuevo estado.
Los efectos del sedentarismo en el embarazo pueden ser muy perjudiciales si no somos conscientes de ello. Pasarse todos los días en continuo reposo, haciendo el mínimo esfuerzo no es la solución para evitar que tengamos algún tropiezo embarazada o cojamos más peso del debido.
Si, de manera continua, durante los meses de gestación, llevamos una vida sedentaria, nuestra salud puede derivar en problemas de depresión. Según una investigación realizada por la Universidad de Warwick ,Inglaterra, han llegado a la conclusión de la relación directa que existe entre el sedentarismo y la depresión.
Ya que es una etapa donde se producen muchos cambios, tanto mentales como físicos, en el embarazo debemos estar muy alertas y llevar cada periodo de la mejor manera posible. Así evitaremos, en este caso, afecciones mentales como la tristeza generalizada durante el embarazo.
Además, el sedentarismo no solo nos afecta psicológicamente, sino también presenta una mayor incidencia en nuestro peso, derivando en una diabetes gestacional en muchos casos. Estando embarazadas, somos más proclives a pasar más tiempo sentadas por la carga que tenemos extra en nuestros cuerpos, pero si pasamos demasiado tiempo descansando, los problemas pueden ser nefastos.
Fatigas, calambres, retención de líquidos, dolores articulares, problemas de circulación en las piernas, estreñimiento, varices o hemorroides, son otras molestias que se maximizan al adoptar el sedentarismo como modo de vida durante el embarazo.
Una vida monótona y con largos periodos de tiempo prolongados sin actividad física nos puede derivar en serios problemas, por ello es recomendable saber cómo evitar la vida sedentaria en el embarazo.
Además, tendrás mejor ánimo, más confianza en ti misma y seguridad, lo que evita la depresión posparto y un posible debilita mente mental. El cerebro descarga con el deporte endorfinas, provocando un bienestar completo en la gestante y, eso te ayudará a dormir mejor y relajarte cuando debas hacerlo.
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