En tu estado te será difícil practicar sexo, pues podrías aplastar al futuro bebé, incomodarlo con la penetración de tu pareja y hasta causar un aborto espontáneo. Esto es un supuesto falso. Quizá el pensar que ahora la embarazada latina alberga una vida dentro de tu ser hace que esta creencia se mantenga.

Sin embargo, los médicos establecen que durante el embarazo la pareja puede continuar con su actividad sexual, siempre y cuando no haya una restricción del médico. Si todo está bien, puedes continuar con tu práctica, pero ahora teniendo en cuenta ciertos requisitos, como las posturas sexuales especiales para el embarazo y bajar la intensidad del acto a medida que la barriguita crezca.

Los primeros tres meses del embarazo son ideales para la actividad sexual, ya que la mujer no tiene su ciclo menstrual ni tiene los síntomas del proceso.