El campo de la reproducción asistida es un área en constante evolución. Día a día surgen innovaciones que revolucionan el sector y ofrecen la posibilidad de ser padres a todas aquellas personas que no pueden concebir de manera natural.

Una de las técnicas más recientes en incorporarse a la medicina embrionaria es el Embryoscope. Se trata de una incubadora que, al tiempo que mantiene in vitro las condiciones fisiológicas que requiere el embrión in vivo, es capaz de capturar imágenes del desarrollo del embrión desde el mismo primer instante y durante las 24 horas del día.

Esta novedosa técnica, disponible en clínicas de fertilidad prioneras como Procreatec, permite llevar un seguimiento y un registro fotográfico de los primeros días de desarrollo de nuestro futuro bebé. Más allá de una simple curiosidad, esta revolucionaria técnica consigue evaluar a los embriones durante las 24 horas del día, a diferencia de las técnicas tradicionales que sólo evalúan los embriones una vez al día, obteniendo valiosa información sobre la velocidad y los patrones de división del embrión. Con esta información los médicos son capaces de evaluar su potencial de implantación e implantar así en el útero, sólo los embriones que tienen mayores posibilidades.

Con esta nueva técnica, se consigue aumentar considerablemente la tasa de éxito de la implantación (hasta en un 20%, según recientes estudios) aumentando así las posibilidades de concebir de cada vez más y más gente a la vez que se  reduce el riesgo de embarazo múltiple que suelen asociarse con la reproducción asistida.