El sangrado de la nariz en el embarazo suele ser una de las molestias más habituales de las embarazadas. Las hemorragias nasales suelen aparecer en el primer trimestre pero pueden mantenerse durante todo el proceso de gestación. El sangrado nasal consiste en la ruptura de algunos de los pequeños vasos sanguíneos de la nariz, provocando así la pérdida de sangre.

Los síntomas de la hemorragia nasal son el taponamiento y la pérdida de sangre por alguno de los orificios de la nariz. El sangrado nasal en el embarazo es más probable si estás resfriada, si vives en lugares fríos y secos o si tienes alguna patología previa de alergia o sinusitis, ya que la sequedad o irritación de la nariz facilitan

Esta molestia puede ser frecuente en el embarazo y aunque es desagradable, no debería suponer ningún tipo de riesgo para el embarazo. Nos obstante, siempre es mejor consultar al médico para confirmarlo.