La lactancia materna raramente se encuentra contraindicada, son contados los casos donde se debe evitar. Existen casos especiales donde las madres llegan a tener dudas sobre si dar a su bebé o no. A continuación, repasamos toda la información sobre la lactancia materna en casos especiales, y cuando debe ser estudiada de manera individual, ya que puede presentarse mal entendidos ya sea por cultura, mal información o autoafirmación, donde la madre deja de darle pecho a su hijo pensando que es lo correcto.
Los beneficios de la leche materna para los peques son múltiples, por ello, aunque en ciertas situaciones sea más complicado dar el pecho debemos recordar que no es un imposible.
La reducción mamaria es un procedimiento quirúrgico, se realiza para disminuir el tamaño de las mamas, en los casos donde estas sean muy voluminosas, llegando a producir problemas de columna, además generan problemas de autoestima en las adolescentes.
Dar de mamar con el pecho operado es posible, pero la reducción mamaria podría llegar a afectar la lactancia materna a futuro, dependiendo del tipo de intervención que se realice. Para evitar este problema se debe escoger el procedimiento que brinde mejores resultados sin comprometer la lactancia más adelante.
Dependiendo de la intervención se podría ver afectada la lactancia materna. Si el implante mamario se sitúa por detrás del músculo pectoral, generará problemas a futuro ya que respeta la glándula mamaria.
En cambio las intervenciones donde se aborda por la areola para introducir el implante suele generar dificultades para la lactancia materna en un futuro, aunque no un impedimento completamente. Y tras el embarazo es conveniente esperar 6 meses para operarse del pecho después de amamantar.
La diabetes ya sea tipo I o tipo II, no representa una contraindicación para la latania materna. En cambio se debe practicar si se posee estas patologías, ya que amamantar a su bebé contribuye a reducir los niveles de glucemia en sangre y previene que el niño desarrolla la enfermedad a futuro.
Otro de los casos especiales de lactancia materna es cuando se padece de tiroides. Para la mujer con problemas de tiroides, es importante el control médico y sigan su tratamiento, ya que esto puede generar problemas a la hora de producir leche materna.
En los casos de madres con hipotiroidismo, no se debe prohibir la lactancia, si está tomando hormonas estas pasan a su hijo por medio de la leche, pero no generan ningún problema. En mujeres con hipertiroidismo donde se debe tomar medicamentos antitiroideos, no es una contraindicación para darle lactancia materna al bebé.
El asma en una enfermedad crónica, con un fuerte componente alérgico que desencadena las crisis. Padecer esta enfermedad no descalifica a una madre para dar lactancia materna, en cuanto a los medicamentos se debe consultar con el especialista para analizar individualmente cada uno de ellos.
Cuando se detecta un bulto en una mama se debe proceder a investigar, la presencia de lipomas, quiste, papilomas o tumoraciones benignas no representan una contraindicación para la lactancia materna. Tras la cirugía para la extirpación de estas tumoraciones suele ser conservador y no afectar la glándula mamaria.
Durante la realización de las pruebas, como la resonancia magnética, ecografía mamaria, gammagrafía o la biopsia, no se contraindica la lactancia.
En cambio si se detecta un tumor maligno, la lactancia materna se suspende, debido a los medicamentos que están contraindicados durante la lactancia y que finalmente la mama deberá ser extirpada totalmente como parte del tratamiento.
Las madres con depresión posparto deben consultar con su médico tratante, para verificar que su tratamiento es compatible con la lactancia materna, esto permitirá despejar las dudas sobre si dar o no.
Las mujeres que tienen un parto por cesárea suelen tener una recuperación más lenta. No obstante, esto no significa que la lactancia y la cesárea sean incompatibles, la primera toma suele darse muchas veces tras una hora de vida dado que los medicamentos utilizados en un parto por cesárea suelen ser viables con la opción de dar el pecho. Eso sí existen algunas posturas más favorables para dar el pecho tras la cesárea.
Para los bebés prematuros que nacen alrededor de la semana 37 es de vital importancia, gran parte de los prematuros se pueden alimentar de forma exclusiva con leche de su madre desde su nacimiento, sin necesitar ningún aporte extra de nutrientes. Sin embargo, los prematuros de muy bajo peso y los de extremadamente bajo peso sí que poseen necesidades nutricionales especiales. En estos casos puede ser necesario añadir determinados nutrientes y minerales a la leche materna. En un primer momento, dependiendo del grado de prematuridad ¡ puede ser necesario administrar la leche materna mediante una sonda nasogástrica.
La lactancia materna raramente se encuentra contraindicada, son contados los casos donde se debe evitar. Existen casos especiales donde las madres llegan a tener dudas sobre si dar a su bebé o no. A continuación, repasamos toda la información sobre la lactancia materna en casos especiales, y cuando debe ser estudiada de manera individual, ya que puede presentarse mal entendidos ya sea por cultura, mal información o autoafirmación, donde la madre deja de darle pecho a su hijo pensando que es lo correcto.
Los beneficios de la leche materna para los peques son múltiples, por ello, aunque en ciertas situaciones sea más complicado dar el pecho debemos recordar que no es un imposible.
La reducción mamaria es un procedimiento quirúrgico, se realiza para disminuir el tamaño de las mamas, en los casos donde estas sean muy voluminosas, llegando a producir problemas de columna, además generan problemas de autoestima en las adolescentes.
Dar de mamar con el pecho operado es posible, pero la reducción mamaria podría llegar a afectar la lactancia materna a futuro, dependiendo del tipo de intervención que se realice. Para evitar este problema se debe escoger el procedimiento que brinde mejores resultados sin comprometer la lactancia más adelante.
Dependiendo de la intervención se podría ver afectada la lactancia materna. Si el implante mamario se sitúa por detrás del músculo pectoral, generará problemas a futuro ya que respeta la glándula mamaria.
En cambio las intervenciones donde se aborda por la areola para introducir el implante suele generar dificultades para la lactancia materna en un futuro, aunque no un impedimento completamente. Y tras el embarazo es conveniente esperar 6 meses para operarse del pecho después de amamantar.
La diabetes ya sea tipo I o tipo II, no representa una contraindicación para la latania materna. En cambio se debe practicar si se posee estas patologías, ya que amamantar a su bebé contribuye a reducir los niveles de glucemia en sangre y previene que el niño desarrolla la enfermedad a futuro.
Otro de los casos especiales de lactancia materna es cuando se padece de tiroides. Para la mujer con problemas de tiroides, es importante el control médico y sigan su tratamiento, ya que esto puede generar problemas a la hora de producir leche materna.
En los casos de madres con hipotiroidismo, no se debe prohibir la lactancia, si está tomando hormonas estas pasan a su hijo por medio de la leche, pero no generan ningún problema. En mujeres con hipertiroidismo donde se debe tomar medicamentos antitiroideos, no es una contraindicación para darle lactancia materna al bebé.
El asma en una enfermedad crónica, con un fuerte componente alérgico que desencadena las crisis. Padecer esta enfermedad no descalifica a una madre para dar lactancia materna, en cuanto a los medicamentos se debe consultar con el especialista para analizar individualmente cada uno de ellos.
Cuando se detecta un bulto en una mama se debe proceder a investigar, la presencia de lipomas, quiste, papilomas o tumoraciones benignas no representan una contraindicación para la lactancia materna. Tras la cirugía para la extirpación de estas tumoraciones suele ser conservador y no afectar la glándula mamaria.
Durante la realización de las pruebas, como la resonancia magnética, ecografía mamaria, gammagrafía o la biopsia, no se contraindica la lactancia.
En cambio si se detecta un tumor maligno, la lactancia materna se suspende, debido a los medicamentos que están contraindicados durante la lactancia y que finalmente la mama deberá ser extirpada totalmente como parte del tratamiento.
Las madres con depresión posparto deben consultar con su médico tratante, para verificar que su tratamiento es compatible con la lactancia materna, esto permitirá despejar las dudas sobre si dar o no.
Las mujeres que tienen un parto por cesárea suelen tener una recuperación más lenta. No obstante, esto no significa que la lactancia y la cesárea sean incompatibles, la primera toma suele darse muchas veces tras una hora de vida dado que los medicamentos utilizados en un parto por cesárea suelen ser viables con la opción de dar el pecho. Eso sí existen algunas posturas más favorables para dar el pecho tras la cesárea.
Para los bebés prematuros que nacen alrededor de la semana 37 es de vital importancia, gran parte de los prematuros se pueden alimentar de forma exclusiva con leche de su madre desde su nacimiento, sin necesitar ningún aporte extra de nutrientes. Sin embargo, los prematuros de muy bajo peso y los de extremadamente bajo peso sí que poseen necesidades nutricionales especiales. En estos casos puede ser necesario añadir determinados nutrientes y minerales a la leche materna. En un primer momento, dependiendo del grado de prematuridad ¡ puede ser necesario administrar la leche materna mediante una sonda nasogástrica.
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