Es una pregunta que se aparece en la mente de toda mujer embarazada. Se puede calcular recordando el primer día de tu última menstruación y desde esa fecha considerar los 266 días contados luego de la concepción. En promedio 40 semanas o 9 meses.

Cuando la futura madre no recuerda la fecha de su última menstruación, los médicos acuerdan realizar un “ultrasonido temprano”, este examen es importante porque el ciclo menstrual puede confundirse con el sangrado por implantación, conocido como un líquido menos espeso y de coloración rosada – marrón; la cual ocurre mientras el embrión intenta anidarse con el endometrio.

Los especialistas muchas veces prefieren dar plazos o tiempos estimados respecto al nacimiento del bebé. De esta manera la gestante aprende a manejar el estrés generado por la espera.

En algunos casos la fecha del parto indicada por el médico finaliza y entonces esta situación se vuelve preocupante. Sin embargo, se estima considerar las 42 semanas como tiempo máximo, es normal si el bebé nace luego de 2 semanas después a la fecha programada o 2 semanas antes.

Si llegas a las 42 semanas y aún no se inician las contracciones uterinas, lo recomendable es inducir al parto.