Si tienes contracciones antes de tiempo, lo primero que debes hacer es respirar y tranquilizarte. Después de inspirar profundamente y que te sientas un poco más tranquila puedes acudir a tu médico.
Las contracciones antes de la semana 37 de embarazo pueden resultar problemáticas. Estas, pueden dar origen a un trabajo de parto pretérmino. Por eso, es importante saber identificar sus características y acudir a tiempo al especialista.
Existen pequeñas contracciones molestas, pero no dolorosas que van preparando el útero y el cuello uterino para el parto varias semanas antes. Estas no son peligrosas para tu bebé ni para ti, es importante que sepas diferenciarlas de las contracciones del trabajo de parto, en especial si tienes menos de 9 meses de gestación.
Apenas sientas una contracción lo que debes hacer es sentarte, respirar y tranquilizarte. Una vez esta ceda toma un cronómetro o un reloj o nuestro contador de contracciones e inicia el conteo de 10 minutos. Cuenta cuántos segundos tarda cada contracción y cuantas ocurren en 10 minutos.
Si tienes entre 3 y 5 contracciones en 10 minutos y estas duran más de 60 segundos es posible que estés iniciando el trabajo de parto. Acude a tu médico para que administre drogas tocolíticas. Si no llegas a esos parámetros puedes estar tranquila.
Si la contracción uterina inicia luego de que ya has cumplido la semana 37 de embarazo, felicidades. Es posible que este iniciando el trabajo de parto. No importa si aun tú fecha probable de parto está lejana, tu bebé está a término para este momento y puede nacer.
En este caso, lo que tienes que hacer es preparar tus cosas para la hospitalización, si todavía no la tienes lista. La ropa de tu pequeño, tu ropa, los productos de aseo personal entre otros. Después de pedir a alguien que contacte a tu médico y te lleve al centro de salud más cercano.
Si tienes contracciones antes de tiempo, lo primero que debes hacer es respirar y tranquilizarte. Después de inspirar profundamente y que te sientas un poco más tranquila puedes acudir a tu médico.
Las contracciones antes de la semana 37 de embarazo pueden resultar problemáticas. Estas, pueden dar origen a un trabajo de parto pretérmino. Por eso, es importante saber identificar sus características y acudir a tiempo al especialista.
Existen pequeñas contracciones molestas, pero no dolorosas que van preparando el útero y el cuello uterino para el parto varias semanas antes. Estas no son peligrosas para tu bebé ni para ti, es importante que sepas diferenciarlas de las contracciones del trabajo de parto, en especial si tienes menos de 9 meses de gestación.
Apenas sientas una contracción lo que debes hacer es sentarte, respirar y tranquilizarte. Una vez esta ceda toma un cronómetro o un reloj o nuestro contador de contracciones e inicia el conteo de 10 minutos. Cuenta cuántos segundos tarda cada contracción y cuantas ocurren en 10 minutos.
Si tienes entre 3 y 5 contracciones en 10 minutos y estas duran más de 60 segundos es posible que estés iniciando el trabajo de parto. Acude a tu médico para que administre drogas tocolíticas. Si no llegas a esos parámetros puedes estar tranquila.
Si la contracción uterina inicia luego de que ya has cumplido la semana 37 de embarazo, felicidades. Es posible que este iniciando el trabajo de parto. No importa si aun tú fecha probable de parto está lejana, tu bebé está a término para este momento y puede nacer.
En este caso, lo que tienes que hacer es preparar tus cosas para la hospitalización, si todavía no la tienes lista. La ropa de tu pequeño, tu ropa, los productos de aseo personal entre otros. Después de pedir a alguien que contacte a tu médico y te lleve al centro de salud más cercano.
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