Es probable que un estornudo o una fuerte carcajada haya provocado en ti un escape de orina. En realidad no tienes por qué preocuparte, la incontinencia urinaria es una condición normal a la que se ven expuestas muchas mujeres embarazadas debido al crecimiento de sus bebés.

La incontinencia urinaria no es específicamente una enfermedad, durante el embarazo es frecuente experimentar esas ganas apremiantes de orinar debido a un mal funcionamiento de la uretra. ¿La razón? La presión que el  útero hace sobre la vejiga a consecuencia de el desarrollo del feto en el último trimestre de gestación.

Aún cuando esta situación sea considerada completamente natural en tu estado, es recomendable revisar siempre que efectivamente se trate de pérdidas de orina y no del líquido amniótico que rodea a tu bebé. Observa el su color y huélelo para cerciorarte de su origen.