¿Seré de las que vomita mucho en los primeros meses? ¿Crecerá mucho la barriga o apenas me la notaré? ¿Podré padecer depresión posparto? Aunque el embarazo es una de las experiencias más deseadas y bonitas que puede experimentar una mujer, el miedo en el embarazo es un hecho real, ya sea por la inevitable idea de que algo no vaya bien o por la preocupación a que el médico nos diga algo malo.

Esta etapa hay que vivirla con normalidad, como algo esperado y sin miedo alguno que nos haga no disfrutar del crecimiento de nuestro futuro hijo en nuestro interior. Por ello, a continuación, os vamos a dar una serie de consejos para controlar y vencer el miedo en el embarazo, para encontrar las cientos y cientos de razones por las que llevar un embarazo tranquilo y muy feliz.

Cómo vencer los miedos en el embarazo

Para saber cómo controlar el miedo en el embarazo, lo primero que tenemos que detectar cuales son los más frecuentes a los que las mujeres le temen.

El primero, nada más saber que se está embarazada, lo que más miedo da es perder al bebé. Como, hasta que no pasan tres meses, se puede tener algún tipo de problema y que la vida del feto se vea afectada, la futura madre tiene esa sensación y la suele transmitir a su entorno. O el miedo en el embarazo a sufrir un aborto espontáneo, sobre todo si se ha tenido uno con anterioridad también puede preocupar en esta etapa.

A medida que el embarazo va avanzando, se pierden esos miedos, pero se van centrando los temores en cuanto al desarrollo del bebé en el vientre se refiere. El volumen y la forma de la tripa, el crecimiento normalizado del bebé, ¿tendrá problemas de corazón? ¿tendré la tensión alta con el embarazo? ¿mi pareja me verá sexy?

Todo se empieza a forman en la cabeza de la gestante y poco a poco el temor va apareciendo y puede derivar en problemas de estrés y ansiedad. Pero hay mil y una razones de peso para ser positiva durante el embarazo y disfrutar de esta etapa al completo.

Otros miedos también se refieren a la maternidad, al futuro tras el parto: ¿seré buena madre? ¿podré dar de mamar? ¿y si daño a mi bebé al cogerlo?

• Cada pregunta que te hagas, resuélvela con tu ginecólogo o matrona. Si quieres saber cómo se va desarrollando el feto o sobre tu propio cuerpo o mente, lo mejor es valorar el trabajo de los profesionales y saber dejarnos aconsejar por manos expertas que nos pueden ayudar.
• Comparte tus sentimientos con personas cercanas. No te dejes nada dentro, expresa tus dudas y preocupaciones a tu pareja, familia o amigos cercanos. Ellos sabrán apreciar los cambios emocionales del embarazo y escucharte, además te podrán dar su opinión y consejos.
• Aprende a relajarte. Con las técnicas de respiración que vamos a conocer en las clases de preparación al parto más otras prácticas a las que podemos acudir (yoga, pilates), las podremos utilizar para sentirnos más tranquilas y mejor con nosotras mismas a diario en el embarazo.
• No te estreses a diario. Aunque suene muy sencillo de decir, pero difícil de llevar a cabo, reducir el estrés en el embarazo y en tu vida cotidiana debe ser tu máxima a seguir cada día. Evita preocupaciones indebidas y mantén alejados de tu vida los miedos y problemas que no te afecten directamente.
• Dedícate tiempo para ti. Si eres de las que se relaja pintando, leyendo o haciendo punto, entre otras actividades, hazla. Reserva un rato para desconectar y empléalo en hacer algo que te guste.
• Mantén la ilusión por tu bebé. El embarazo es solo una etapa, un proceso de gestación que acabara y debes tener la ilusión y el optimismo de la vida que está a punto de nacer de tu interior.