Puedo tomar nata líquida en el embarazo
Si acabas de enterarte de que estás embarazada una de tus prioridades es cuidar tu alimentación. Y posiblemente sabrás que no puedes comer pescado crudo, pero otros ingredientes te generan ciertas dudas. Hoy intentamos aclarar ¿puedo comer nata en el embarazo? conoce la respuesta aquí.
En el momento en el que te planteas tener un bebé o sabes que estás embarazada, son varios los hábitos alimenticios que debes tener en cuenta.
Sin embargo, aunque algunos alimentos prohibidos en el embarazo son muy conocidos, otros pueden estar limitados o según su manera de cocinarlos pueden ser buenos o malos en tu estado.
La nata es uno de ellos, puedes tomar nata montada en el embarazo o nata líquida, pero nunca correrás riesgos si conoces las siguientes recomendaciones.
Recuerda que la leche y sus derivados en caso de sobrepeso en el embarazo no están muy aconsejados, así como:
En cuanto al consumo de nata en la gestación debe ser moderado y podemos hacer algunas especificaciones.
El problema de consumir nata no pasteurizada en el embarazo es que puedes contagiarte de listeriosis y puede suponer un problema en el crecimiento y desarrollo de tu bebé, considerando serias complicaciones a largo plazo.
Recuerda que puedes consumirlo de manera moderada y cocinado, para matar la bacteria, en caso de estar presente en el alimento.
El problema de los lácteos sin pasteurizar es tomarlo crudo.
Si tomas leche o nata en tu estado debes tener en cuenta que en el envase aparezcan las siglas UHT (Ultra High Temperature). Estas siglas significan que la leche ha sido sometida a un proceso de ultrapasteurización o uperización, por el que se eliminan un buen número de bacterias, entre las cuales se cuenta la listeria.
La receta de helado de manzanilla o la receta de gratinado de brócoli con queso cheddar son adecuadas para añadirlas a tu dieta de embarazada.
La bollería que suele llevar este ingrediente, en tu caso es mejor reemplazarlo por otros ingredientes más saludables, como los cereales o las harinas integrales con menos azúcares añadidos y grasas saturadas.
Por ello, la nata montada o la crema pastelera no están muy recomendadas en la gestación, dado que no contribuyen a mantener a raya el aumento de peso.
Si tienes alguna duda más respecto a la nata montada en el embarazo o la nata líquida puedes consultarlo con tu especialista y te dará las mejores opciones para reemplazarlo o algunas recomendaciones para tomarlo sin riesgos.
En cualquier caso, si tienes antojo de fresas con nata, ya sabes qué precauciones debes tomar y que lo aconsejable es que sea nata pasteurizada.
Lo principal es mantener una dieta equilibrada y saludable, con alimentos altamente recomendados.
Aunque de vez en cuando te permitas algún capricho con nata o leche condensada, sin abusar.
Si acabas de enterarte de que estás embarazada una de tus prioridades es cuidar tu alimentación. Y posiblemente sabrás que no puedes comer pescado crudo, pero otros ingredientes te generan ciertas dudas. Hoy intentamos aclarar ¿puedo comer nata en el embarazo? conoce la respuesta aquí.
En el momento en el que te planteas tener un bebé o sabes que estás embarazada, son varios los hábitos alimenticios que debes tener en cuenta.
Sin embargo, aunque algunos alimentos prohibidos en el embarazo son muy conocidos, otros pueden estar limitados o según su manera de cocinarlos pueden ser buenos o malos en tu estado.
La nata es uno de ellos, puedes tomar nata montada en el embarazo o nata líquida, pero nunca correrás riesgos si conoces las siguientes recomendaciones.
Recuerda que la leche y sus derivados en caso de sobrepeso en el embarazo no están muy aconsejados, así como:
En cuanto al consumo de nata en la gestación debe ser moderado y podemos hacer algunas especificaciones.
El problema de consumir nata no pasteurizada en el embarazo es que puedes contagiarte de listeriosis y puede suponer un problema en el crecimiento y desarrollo de tu bebé, considerando serias complicaciones a largo plazo.
Recuerda que puedes consumirlo de manera moderada y cocinado, para matar la bacteria, en caso de estar presente en el alimento.
El problema de los lácteos sin pasteurizar es tomarlo crudo.
Si tomas leche o nata en tu estado debes tener en cuenta que en el envase aparezcan las siglas UHT (Ultra High Temperature). Estas siglas significan que la leche ha sido sometida a un proceso de ultrapasteurización o uperización, por el que se eliminan un buen número de bacterias, entre las cuales se cuenta la listeria.
La receta de helado de manzanilla o la receta de gratinado de brócoli con queso cheddar son adecuadas para añadirlas a tu dieta de embarazada.
La bollería que suele llevar este ingrediente, en tu caso es mejor reemplazarlo por otros ingredientes más saludables, como los cereales o las harinas integrales con menos azúcares añadidos y grasas saturadas.
Por ello, la nata montada o la crema pastelera no están muy recomendadas en la gestación, dado que no contribuyen a mantener a raya el aumento de peso.
Si tienes alguna duda más respecto a la nata montada en el embarazo o la nata líquida puedes consultarlo con tu especialista y te dará las mejores opciones para reemplazarlo o algunas recomendaciones para tomarlo sin riesgos.
En cualquier caso, si tienes antojo de fresas con nata, ya sabes qué precauciones debes tomar y que lo aconsejable es que sea nata pasteurizada.
Lo principal es mantener una dieta equilibrada y saludable, con alimentos altamente recomendados.
Aunque de vez en cuando te permitas algún capricho con nata o leche condensada, sin abusar.
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