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El periodo intergenésico es el tiempo entre una gestación y otra, los expertos recomiendan que este sea por lo menos de unos 18 a 22 meses, para darle tiempo a la madre de recuperarse correctamente. Por este motivo, tras el parto la preocupación de quedarse embarazada aumenta y el uso de las pastillas anticonceptivas durante el posparto representa una opción para las parejas que quieran cuidarse durante esta etapa. Repasa toda la información sobre este tipo de anticonceptivo tras el parto e infórmate.
Existen muchos métodos anticonceptivos durante la etapa de la lactancia materna y el posparto, cada uno con una tasa de efectividad excelente y de bajo riesgo para la lactancia, pero en esta ocasión hablaremos sobre las pastillas anticonceptivas en el posparto. Representan un método anticonceptivo de tipo hormonal, es uno de los métodos más usados en todo el mundo.
Contienen tanto estrógenos como progestina. Los estrógenos se encuentran contraindicados como método anticonceptivo durante el posparto, debido a que afectan la calidad y cantidad de la leche materna, a su vez reducen la duración de la lactancia.
Además llegan a afectar el crecimiento de los bebés, por lo que se han prohibido durante el periodo de lactancia materna, o a hasta que el bebé cumpla los 6 meses de edad, una vez se pasa a la alimentación complementaria. Su uso debe postergarse el mayor tiempo posible, algunos recomiendan hasta después del ver la primera regla después del parto.
Dentro de sus ventajas podemos mencionar, mejora el acné en el posparto, regulariza los ciclos menstruales, reduce el dolor y la duración, disminuye la aparición de vello indeseado y las migrañas son menos frecuentes.
No están recomendadas en mujeres mayores de 35 años, fumadoras, hipertensas o con problemas cardiovasculares. Se ha observado que puede aumentar el riesgo de derrame cerebral. Se ha descrito que elevan el riesgo de trombosis venosa profunda, ya que aumenta la probabilidad de formar coágulos en las venas.
Las pastillas anticonceptivas a base de progesterona se administran partir de la semana número 6 del posparto. Representan un método anticonceptivo durante la lactancia materna. Las pastillas anticonceptivas de progestina, no afecta la calidad ni cantidad de la leche, tampoco intervienen en el desarrollo del bebé. Su eficacia es muy alta, donde las tasas de embarazos es mejor del 1%.
Una de sus ventajas es que reduce el riesgo de anemia, ya que los ciclos menstruales se alargan y el sangrado disminuye. Este método anticonceptivo, no se recomienda en pacientes con problemas hepáticos, o cáncer, tampoco en aquellas que tengan antecedentes familiares de cáncer de mama.
Es una pastilla que se debe tomar justamente a la hora, no se debe exceder más de tres, ya que se necesitará un método de respaldo.
La respuesta es afirmativa solo se deben evitar durante las primeras 6 semanas para los anticonceptivos con progestina, y durante los primero seis meses en caso de los métodos combinados.
Las pastillas anticonceptivas con estrógenos tan solo se debe usar si se es estrictamente necesario, donde no se cuente con otro tipo método anticonceptivo. Esto para evitar los efectos sobre la lactancia materna y el desarrollo del bebé.
Las pastillas conceptivas con progestina, representan una buena opción, estas no afectan la lactancia materna, no interfieren con el desarrollo del bebé y no afectan las relaciones sexuales. Posee muy pocas contraindicaciones y se ha logrado buenos resultados, con tasas de embarazos por debajo del 1%.
El periodo intergenésico es el tiempo entre una gestación y otra, los expertos recomiendan que este sea por lo menos de unos 18 a 22 meses, para darle tiempo a la madre de recuperarse correctamente. Por este motivo, tras el parto la preocupación de quedarse embarazada aumenta y el uso de las pastillas anticonceptivas durante el posparto representa una opción para las parejas que quieran cuidarse durante esta etapa. Repasa toda la información sobre este tipo de anticonceptivo tras el parto e infórmate.
Existen muchos métodos anticonceptivos durante la etapa de la lactancia materna y el posparto, cada uno con una tasa de efectividad excelente y de bajo riesgo para la lactancia, pero en esta ocasión hablaremos sobre las pastillas anticonceptivas en el posparto. Representan un método anticonceptivo de tipo hormonal, es uno de los métodos más usados en todo el mundo.
Contienen tanto estrógenos como progestina. Los estrógenos se encuentran contraindicados como método anticonceptivo durante el posparto, debido a que afectan la calidad y cantidad de la leche materna, a su vez reducen la duración de la lactancia.
Además llegan a afectar el crecimiento de los bebés, por lo que se han prohibido durante el periodo de lactancia materna, o a hasta que el bebé cumpla los 6 meses de edad, una vez se pasa a la alimentación complementaria. Su uso debe postergarse el mayor tiempo posible, algunos recomiendan hasta después del ver la primera regla después del parto.
Dentro de sus ventajas podemos mencionar, mejora el acné en el posparto, regulariza los ciclos menstruales, reduce el dolor y la duración, disminuye la aparición de vello indeseado y las migrañas son menos frecuentes.
No están recomendadas en mujeres mayores de 35 años, fumadoras, hipertensas o con problemas cardiovasculares. Se ha observado que puede aumentar el riesgo de derrame cerebral. Se ha descrito que elevan el riesgo de trombosis venosa profunda, ya que aumenta la probabilidad de formar coágulos en las venas.
Las pastillas anticonceptivas a base de progesterona se administran partir de la semana número 6 del posparto. Representan un método anticonceptivo durante la lactancia materna. Las pastillas anticonceptivas de progestina, no afecta la calidad ni cantidad de la leche, tampoco intervienen en el desarrollo del bebé. Su eficacia es muy alta, donde las tasas de embarazos es mejor del 1%.
Una de sus ventajas es que reduce el riesgo de anemia, ya que los ciclos menstruales se alargan y el sangrado disminuye. Este método anticonceptivo, no se recomienda en pacientes con problemas hepáticos, o cáncer, tampoco en aquellas que tengan antecedentes familiares de cáncer de mama.
Es una pastilla que se debe tomar justamente a la hora, no se debe exceder más de tres, ya que se necesitará un método de respaldo.
La respuesta es afirmativa solo se deben evitar durante las primeras 6 semanas para los anticonceptivos con progestina, y durante los primero seis meses en caso de los métodos combinados.
Las pastillas anticonceptivas con estrógenos tan solo se debe usar si se es estrictamente necesario, donde no se cuente con otro tipo método anticonceptivo. Esto para evitar los efectos sobre la lactancia materna y el desarrollo del bebé.
Las pastillas conceptivas con progestina, representan una buena opción, estas no afectan la lactancia materna, no interfieren con el desarrollo del bebé y no afectan las relaciones sexuales. Posee muy pocas contraindicaciones y se ha logrado buenos resultados, con tasas de embarazos por debajo del 1%.
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