La colestasis en el embarazo se trata de una enfermedad poco usual, pero, que puede afectar gravemente la salud del bebé. Es importante que tengas conocimiento sobre los síntomas y el diagnóstico de ella. Es una alteración en el funcionamiento del hígado y puede llegar a causar consecuencias en el bebé e incluso puede causar la muerte. Actúa sobre el hígado y suele presentarse en la recta final del embarazo.
Algunos de los factores de riesgo de esta enfermedad son: los casos de embarazo múltiples, antecedentes de enfermedades hepáticas o la realización de un tratamiento de fecundación in vitro. la colestasis gravídica puede ser causas por una alteración hormonal.
Lamentablemente, los síntomas son inespecíficos y algunos difíciles de identificar por ti misma. Sin embargo, tener conocimiento de ellos y una buena comunicación con tu médico hará posible el diagnóstico de la colestasis. Así que no dudes acudir a consulta si presentas:
Lo más usual y el síntoma más prominente para ti será la picazón. Si este perdura por más de un par de días y no se alivia con aplicación de cremas o con el baño sabrás que es momento de pedir una opinión médica. En caso de presentar estos síntomas en el embarazo acude a tu médico para que te realice un análisis de sangre para examinar tu hígado y controle los latidos fetales del bebe.
Los síntomas son muy parecidos a otras enfermedades alérgicas o hepáticas. Por eso, es esencial que tu médico realice una serie de pruebas si tienes prurito en el cuerpo. De forma que, al final el diagnóstico se hace por descarte.
Lo criterios que definen a esta patología son:
Se consideran anormales cuando su valor está por encima de 14 micromoles/ L en la sangre de una mujer que haya comido y más de 10 micromoles/ L en mujeres previo ayuno.
Lo usual es hacer la medición de los ácidos biliares de forma total, pero, pueden medirse cada uno de ellos por separado. Aquí las alteraciones deben estar en los primarios conjugados, el quenodesoxicólico y el ácido cólico. Los ácidos biliares en condiciones normales se producen en el hígado y se excretan hacia el intestino. Al haber una obstrucción, como no pueden ir hacia el intestino se presentan en la sangre.
En la colestasis se altera la función hepática, y esto se puede reflejar en la alteración de los niveles de transaminasas. La ALT es la que se eleva frecuentemente durante la enfermedad, puede triplicar su valor, e incluso aumentarse hasta 20 veces. Mientras que, la AST pudiera tener valores un poco aumentados o normales.
Estos son los marcadores que permiten al médico darse cuenta de que existe un daño hepático.
La Bilirrubina y los tiempos de coagulación pudieran estar fuera del rango normal. Pero, esto sucede tan solo en 10-20% de los casos, por lo que no es un valor esencial para hacer el diagnóstico.
Además de tomarte muestras de sangre para ver cada uno de los valores anteriores te harán un ultrasonido hepático. Con estas imágenes es posible excluir otras enfermedades. Lo usual es que la anatomía hepática y biliar sea normal, mientras que, la eyección de la vesícula aumenta.
Los signos y síntomas de la colestasis en el embarazo se pueden confundir con:
Los médicos aseguran que los efectos o riesgos de la colestasis en el bebé son mucho mayores que en la mujer que pueden ser molestos pero el pequeño depende del estado del hígado de la madre. Por otro lado, uno de los riesgos es que puede ser un parto prematuro e inducido para evitar riesgos innecesarios si el bebé tiene los pulmones lo suficientemente maduros.
Otra de las consecuencias de esta enfermedad en el final de la gestación se caracteriza por la presencia de deposiciones del bebé en el líquido amniótico. Todas estas complicaciones pueden verse minimizadas gracias al tratamiento adecuado.
La colestasis desaparece después de dar a luz, sin embargo puede que este problema vuelva a aparecer en tu segundo embarazo o el tercero.
Normalmente para tratar la colestasis en la mujer embarazada se recetan medicamentos para eliminar el exceso de ácidos biliares, además de algunos suplementos y vitaminas como la vitamina K. Por otro lado,para tratar la comezón de la colestasis se incluye en el tratamiento médico las cremas a base de corticoides para disminuir el picor, baños de agua fría y la aplicación de hielo varias veces al día para mejorar la circulación de la zona afectada.
A la hora de tratar la colestasis en el embarazo el médico debe tener en cuenta lo siguiente: la extensión de la enfermedad, el embarazo, tu salud, tu historia clínica, tu tolerancia a los medicamentos y aquellos que no dañan al feto y tu opinión.
La colestasis en el embarazo se trata de una enfermedad poco usual, pero, que puede afectar gravemente la salud del bebé. Es importante que tengas conocimiento sobre los síntomas y el diagnóstico de ella. Es una alteración en el funcionamiento del hígado y puede llegar a causar consecuencias en el bebé e incluso puede causar la muerte. Actúa sobre el hígado y suele presentarse en la recta final del embarazo.
Algunos de los factores de riesgo de esta enfermedad son: los casos de embarazo múltiples, antecedentes de enfermedades hepáticas o la realización de un tratamiento de fecundación in vitro. la colestasis gravídica puede ser causas por una alteración hormonal.
Lamentablemente, los síntomas son inespecíficos y algunos difíciles de identificar por ti misma. Sin embargo, tener conocimiento de ellos y una buena comunicación con tu médico hará posible el diagnóstico de la colestasis. Así que no dudes acudir a consulta si presentas:
Lo más usual y el síntoma más prominente para ti será la picazón. Si este perdura por más de un par de días y no se alivia con aplicación de cremas o con el baño sabrás que es momento de pedir una opinión médica. En caso de presentar estos síntomas en el embarazo acude a tu médico para que te realice un análisis de sangre para examinar tu hígado y controle los latidos fetales del bebe.
Los síntomas son muy parecidos a otras enfermedades alérgicas o hepáticas. Por eso, es esencial que tu médico realice una serie de pruebas si tienes prurito en el cuerpo. De forma que, al final el diagnóstico se hace por descarte.
Lo criterios que definen a esta patología son:
Se consideran anormales cuando su valor está por encima de 14 micromoles/ L en la sangre de una mujer que haya comido y más de 10 micromoles/ L en mujeres previo ayuno.
Lo usual es hacer la medición de los ácidos biliares de forma total, pero, pueden medirse cada uno de ellos por separado. Aquí las alteraciones deben estar en los primarios conjugados, el quenodesoxicólico y el ácido cólico. Los ácidos biliares en condiciones normales se producen en el hígado y se excretan hacia el intestino. Al haber una obstrucción, como no pueden ir hacia el intestino se presentan en la sangre.
En la colestasis se altera la función hepática, y esto se puede reflejar en la alteración de los niveles de transaminasas. La ALT es la que se eleva frecuentemente durante la enfermedad, puede triplicar su valor, e incluso aumentarse hasta 20 veces. Mientras que, la AST pudiera tener valores un poco aumentados o normales.
Estos son los marcadores que permiten al médico darse cuenta de que existe un daño hepático.
La Bilirrubina y los tiempos de coagulación pudieran estar fuera del rango normal. Pero, esto sucede tan solo en 10-20% de los casos, por lo que no es un valor esencial para hacer el diagnóstico.
Además de tomarte muestras de sangre para ver cada uno de los valores anteriores te harán un ultrasonido hepático. Con estas imágenes es posible excluir otras enfermedades. Lo usual es que la anatomía hepática y biliar sea normal, mientras que, la eyección de la vesícula aumenta.
Los signos y síntomas de la colestasis en el embarazo se pueden confundir con:
Los médicos aseguran que los efectos o riesgos de la colestasis en el bebé son mucho mayores que en la mujer que pueden ser molestos pero el pequeño depende del estado del hígado de la madre. Por otro lado, uno de los riesgos es que puede ser un parto prematuro e inducido para evitar riesgos innecesarios si el bebé tiene los pulmones lo suficientemente maduros.
Otra de las consecuencias de esta enfermedad en el final de la gestación se caracteriza por la presencia de deposiciones del bebé en el líquido amniótico. Todas estas complicaciones pueden verse minimizadas gracias al tratamiento adecuado.
La colestasis desaparece después de dar a luz, sin embargo puede que este problema vuelva a aparecer en tu segundo embarazo o el tercero.
Normalmente para tratar la colestasis en la mujer embarazada se recetan medicamentos para eliminar el exceso de ácidos biliares, además de algunos suplementos y vitaminas como la vitamina K. Por otro lado,para tratar la comezón de la colestasis se incluye en el tratamiento médico las cremas a base de corticoides para disminuir el picor, baños de agua fría y la aplicación de hielo varias veces al día para mejorar la circulación de la zona afectada.
A la hora de tratar la colestasis en el embarazo el médico debe tener en cuenta lo siguiente: la extensión de la enfermedad, el embarazo, tu salud, tu historia clínica, tu tolerancia a los medicamentos y aquellos que no dañan al feto y tu opinión.
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