Si recientemente hemos sido madres, y estamos pensando cuándo será nuestra incorporación al trabajo, o ya tenemos estipulado que tiene que ser antes de los seis meses, vamos a proponerte una serie de técnicas para que puedas conciliar el trabajo y la etapa de la lactancia y continuar con ese tipo de alimentación en el bebé con éxito.

La Organización Mundial de la Salud y el programa UNICEF aconsejan para una óptima alimentación infantil la ingesta de leche materna en exclusiva desde el nacimiento hasta los seis meses de vida. La lactancia materna, posteriormente será combinada con otros alimentos hasta un mínimo de dos años, dependiendo de cada madre y niño.

La leche que genera una madre tras el embarazo para el bebé contiene grasas, proteínas y vitaminas suficientes para que el pequeño crezca y se desarrolle favorablemente, pues además contiene altas dosis de inmunoglobulinas, lo que hace reforzar frente a posibles infecciones al bebé.

Cómo conciliar la vida laboral y la etapa de la lactancia materna

Una de las mayores debilidades de una madre que ha tenido a su hijo hace poco tiempo es pasar el máximo tiempo posible con ellos, darles el pecho y conectar ambos en ese proceso. Si tenemos que conciliar el trabajo y la etapa de la lactancia vamos a tender a agobiarnos, pues no sabemos cómo hacerlo sin alterar el horario o de la comida del bebé o de las horas que tenemos que trabajar.

Para conocer cuáles son los consejos para conciliar el trabajo y la etapa de la lactancia materna y que disfrute de todos los beneficios de la lactancia materna no pierdas detalle de lo que te contamos a continuación:

• Lo ideal para compatibilizar la lactancia y el trabajo es elaborar un planning propio donde intentaremos cuadrar los horarios pertinentes a las comidas del bebé. Si vivimos cerca del trabajo o si tenemos una jornada reducida, las cosas mejoran y podremos casi seguir la misma rutina de alimentación que antes de comenzar a trabajar. Si la oficina se encuentra lejos del domicilio o tenemos una jornada completa, buscar opciones alternativas como guardar leche para que otro familiar se lo dé mientras trabajamos o que alguien se acerque con él para darle el pecho allí.

• Si estás pensando cómo conciliar la vida laboral y la etapa de la lactancia, debes saber que todas las madres, hasta que el bebé cumple 9 meses, tienen disponibles una o dos medias horas de permiso para la lactancia materna durante su tiempo de trabajo diario. Este periodo se puede usar para dar de mamar o extraerte la leche.
• Otra manera de compatibilizar la lactancia materna con la vida laboral es que en los días que no tengamos que trabajar, ya sean festivos o fin de semana, debemos realizar todas las tomas con total normalidad para que, si trabajando no podemos dar el pecho directamente, no se pierda la producción de leche.
• Si no es posible darle el pecho al bebé a lo largo de la jornada, como hemos indicado anteriormente, se puede recurrir a sacarse la leche. Aunque lo ideal es amamantarle, podemos extraernos la leche y transportarla al salir del trabajo en una neverita para que se conserve y dársela en otra ocasión.

Si, ante la inminente incorporación nos sentimos un poco inseguras acerca de si podemos lograrlo, recurrir a la homeopatía para mejorar la producción de leche que puede verse alterada con la vuelta a la rutina laboral y, así asegurarnos un proceso normalizado de lactancia.

No entremos en pánico y recurramos al uso del biberón antes de tiempo. Aunque pensemos que volver a trabajar significa el fin de la lactancia materna, lo cierto es que se puede seguir amamantando perfectamente si tomamos nota de estos consejos para conciliar el trabajo y la etapa de la lactancia.