Técnicas para retomar la lactancia materna después de una interrupción

Lactancia

Técnicas para retomar la lactancia materna después de una interrupción

Hay veces en las que la lactancia materna se ve interrumpida por un breve periodo de tiempo. Recuperarla tras un parón es posible. No obstante, no es sencillo y requiere un trabajo constante y hay que tener paciencia, pues estimular y hacer que la leche vuelva a producirse, así como conseguir que el pequeño vuelva a engancharse, puede costar. Ante todo, mejor no frustrarse. Te mostramos algunos consejos para saber cómo recuperar la lactancia materna después de una interrupción.


Demkat || Shutterstock

¿Es posible recuperar la lactancia tras un parón?

Sí, es posible. Algunas mujeres dejan la lactancia poco tiempo de empezar. Muchas veces es debido a la tensión de los primeros días. La depresión postparto también puede influir, sobre todo si damos pecho a demanda.  Estas son las principales causas, aunque en otras ocasiones se debe a enfermedades, partos prematuros o incluso hospitalización.

Sea cual sea el motivo, una vez pase el temporal, es posible volver a retomar la lactancia. Primero debemos dejar la ansiedad y el estado emocional negativo fuera. Luego, ante todo, informarnos en nuestro médico para poder seguir con un método adecuado.

Cómo recuperar la lactancia materna después de una interrupción

Aunque como comentábamos, es importante consultar con nuestro médico, sobre todo en los casos en los que retomar la lactancia esté siendo complicado, hay algunos consejos que podemos tener en cuenta.

  1. Por ejemplo, lo primero que debemos hacer es volver a tener leche. Recuperar la producción. La mejor forma de hacerlo es con masajes para estimular la lactancia materna a través de la estimulación de los pechos. Asimismo, la mejor estimulación es la succión del propio niño. Los especialistas recomiendan que ofrezcamos al niño con la mayor frecuencia posible. Es más, si lo hacemos a demanda, mejor que mejor. Así facilitaremos el proceso natural.
  2. Opta por incluir en tu dieta remedios galactógenos para estimular la producción de leche materna.
  3. Si el bebé rechaza la alimentación de esta forma y no succiona, es importante estimular la producción de leche mediante un vaciado manual o mecánico de los senos y para ello debes conocer algunos trucos para extraer la leche materna y usar el sacaleches. Eso sí, no dejes de ponerle nunca el pecho al pequeño, así conseguirás finalmente que lo agarre.
  4. Recomiendan también que bebas agua abundantemente, por lo menos dos litros al día, incluido el contenido en los alimentos.
  5. Apuesta por la fisioterapia para recuperar la lactancia: Hay un determinado tipo de fisioterapia aplicada a estos casos. Consiste en efectuar masajes mediante el empleo de una técnica específica en zonas muy concretas de la espalda. Son puntos reflejos que también son usados en acupuntura. Unos puntos concretos que incrementan la oxitocina, la hormona que permite que la leche pueda salir a través de los conocidos como conductos galactóforos.
  6. Utiliza un relactador para acompañar la leche materna: en ocasiones, la producción de leche no es la suficiente al principio. Para evitar el rechazo del bebé, pues pueden frustrarse al ver que la succión no funciona, puedes usar un relactador o suplemento del amamantamiento. Se trata de una bolsa, biberón o vaso, en el que se introduce leche de fórmula. Se inserta una pequeña cánula o tubo muy fino por el que pasa el alimento. Este relactador se coloca junto al pezón, así, al succionarlo, el bebé recibirá la leche a la vez que la leche materna.

evso || Shutterstock

Factores que pueden influir a la hora de recuperar la lactancia materna

También es interesante saber que hay factores que pueden determinar o influir el tiempo de recuperación. Por ejemplo, la edad del bebé. Cuanto más pequeño sea el niño, más fácil será volver a amamantar. Los especialistas aseguran que los menores de tres meses aceptan mejor estas interrupciones que los niños de mayor edad.

El tiempo de interrupción también es importante. Cuanto menor sea, más éxito tendremos, tanto en la producción de leche como en el reenganche del niño.

Miriam Martí

Periodista y apasionada de las redes. Escribo desde hace más de 10 años contenidos muy variados que se ajustan siempre a todos esos temas que me inquietan y me apasionan, como la maternidad.

Hay veces en las que la lactancia materna se ve interrumpida por un breve periodo de tiempo. Recuperarla tras un parón es posible. No obstante, no es sencillo y requiere un trabajo constante y hay que tener paciencia, pues estimular y hacer que la leche vuelva a producirse, así como conseguir que el pequeño vuelva a engancharse, puede costar. Ante todo, mejor no frustrarse. Te mostramos algunos consejos para saber cómo recuperar la lactancia materna después de una interrupción.


Demkat || Shutterstock

¿Es posible recuperar la lactancia tras un parón?

Sí, es posible. Algunas mujeres dejan la lactancia poco tiempo de empezar. Muchas veces es debido a la tensión de los primeros días. La depresión postparto también puede influir, sobre todo si damos pecho a demanda.  Estas son las principales causas, aunque en otras ocasiones se debe a enfermedades, partos prematuros o incluso hospitalización.

Sea cual sea el motivo, una vez pase el temporal, es posible volver a retomar la lactancia. Primero debemos dejar la ansiedad y el estado emocional negativo fuera. Luego, ante todo, informarnos en nuestro médico para poder seguir con un método adecuado.

Cómo recuperar la lactancia materna después de una interrupción

Aunque como comentábamos, es importante consultar con nuestro médico, sobre todo en los casos en los que retomar la lactancia esté siendo complicado, hay algunos consejos que podemos tener en cuenta.

  1. Por ejemplo, lo primero que debemos hacer es volver a tener leche. Recuperar la producción. La mejor forma de hacerlo es con masajes para estimular la lactancia materna a través de la estimulación de los pechos. Asimismo, la mejor estimulación es la succión del propio niño. Los especialistas recomiendan que ofrezcamos al niño con la mayor frecuencia posible. Es más, si lo hacemos a demanda, mejor que mejor. Así facilitaremos el proceso natural.
  2. Opta por incluir en tu dieta remedios galactógenos para estimular la producción de leche materna.
  3. Si el bebé rechaza la alimentación de esta forma y no succiona, es importante estimular la producción de leche mediante un vaciado manual o mecánico de los senos y para ello debes conocer algunos trucos para extraer la leche materna y usar el sacaleches. Eso sí, no dejes de ponerle nunca el pecho al pequeño, así conseguirás finalmente que lo agarre.
  4. Recomiendan también que bebas agua abundantemente, por lo menos dos litros al día, incluido el contenido en los alimentos.
  5. Apuesta por la fisioterapia para recuperar la lactancia: Hay un determinado tipo de fisioterapia aplicada a estos casos. Consiste en efectuar masajes mediante el empleo de una técnica específica en zonas muy concretas de la espalda. Son puntos reflejos que también son usados en acupuntura. Unos puntos concretos que incrementan la oxitocina, la hormona que permite que la leche pueda salir a través de los conocidos como conductos galactóforos.
  6. Utiliza un relactador para acompañar la leche materna: en ocasiones, la producción de leche no es la suficiente al principio. Para evitar el rechazo del bebé, pues pueden frustrarse al ver que la succión no funciona, puedes usar un relactador o suplemento del amamantamiento. Se trata de una bolsa, biberón o vaso, en el que se introduce leche de fórmula. Se inserta una pequeña cánula o tubo muy fino por el que pasa el alimento. Este relactador se coloca junto al pezón, así, al succionarlo, el bebé recibirá la leche a la vez que la leche materna.

evso || Shutterstock

Factores que pueden influir a la hora de recuperar la lactancia materna

También es interesante saber que hay factores que pueden determinar o influir el tiempo de recuperación. Por ejemplo, la edad del bebé. Cuanto más pequeño sea el niño, más fácil será volver a amamantar. Los especialistas aseguran que los menores de tres meses aceptan mejor estas interrupciones que los niños de mayor edad.

El tiempo de interrupción también es importante. Cuanto menor sea, más éxito tendremos, tanto en la producción de leche como en el reenganche del niño.

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