Las familias latinas y especialmente las estadounidenses recuerdan cada 11 de noviembre la valerosa acción de los militares que defendieron su nación, y aquellos que murieron por ella.
Es una fiesta federal y estatal, considerada feriado en algunas escuelas, mientras todas las oficinas de gobierno o los bancos toman este día libre para que sus trabajadores puedan disfrutar de las celebraciones.
Hay servicios especiales que se llevan a cabo en la tumba del Soldado Desconocido, desfiles, ceremonias, homenajes y además grupos de ayuda recaudan fondos para actividades caritativas.