Aunque suelen ser propios de la menopausia, los sofocos o golpes de calor en el embarazo son muy frecuentes, especialmente en el primer y tercer trimestre, además de que se trata de una de las molestias más comunes y frecuentes entre las mujeres embarazadas. Sin saber muy bien las causas, muchas mujeres embarazadas comienzan experimentar una sensación de calor repentina que les recorre el cuerpo y que no pueden ni controlar ni tampoco evitar. Da igual que sea invierno y que en el exterior esté helando, tú puedes sentir que estás en pleno desierto en agosto.
Los sofocos suelen localizarse principalmente en la cabeza, el cuello y el pecho, aunque es posible que se de en otras partes del cuerpo. La duración de los golpes de calor puede variar desde unos segundos, hasta durar varios minutos.
Con respecto a cuando se producen, pueden darse a lo largo de todo el día, pero muchas mujeres experimentan sofocos nocturnos que les impiden dormir o hacen que se levanten completamente empapadas de sudor.
Posibles causas de los Sofocos en el embarazo
Los sofocos o golpes de calor son frecuentes en los primeros meses de embarazo. La razón es muy sencilla: tu cuerpo está cambiando y tu metabolismo comienza a acelerarse. La principal causa de los sofocos durante el embarazo es que al acelerarse nuestro cuerpo genera "calor extra" que conlleva también la dilatación de los vasos sanguíneos.
Por otro lado, durante el último trimestre, nuestro peso corporal ha variado y hemos ganado unos kilos, por lo que nuestro cuerpo necesita más energía para moverse y sobre todo, para manteneos tanto a tí como al bebé que estás esperando. Además, a medida que el feto va creciendo, desplaza los órganos con lo que existe una disminución de la capacidad torácica, es decir, tenemos menos espacio para respirar, lo que puede provocar esa sensación típica de ahogo que experimentan muchas embarazadas.
Advertencia
Aunque es completamente normal tener sofocos cuando estás embarazada, es muy importante que distingas cuando se trata de un golpe de calor o fiebre. Por ello, si tu temperatura corporal supera los 37 o 37,5 grados centígrados, acude inmediatamente al médico.
Tratamientos para aliviar los Sofocos
La mejor forma de
prevenir y tratar de forma natural los golpes de calor durante el embarazo es manteniendo una correcta
hidratación, ya que mientras dure el embarazo, no podrás hacer nada contra tus hormonas, así que lo mejor es que lo intentes llevar de la mejor manera posible y sigas una serie de recomendaciones:
- Cambia los baños de agua caliente por agua tibia, incluso en invierno, ya que bajarás tu temperatura corporal de forma natural.
- Bebe abundante agua, al menos dos litros de agua al día.
No suele existir tratamiento farmacológico para esta molestia, pero sí lo consideras necesario
acude a tu médico, sobre todo si los golpes de calor no cesan después de unos minutos, ya que puede que lo que realmente tengas sea fiebre.
aliviar los Sofocos de forma natural
Remedios para aliviar los Sofocos en el embarazo
Si quieres combatir los sofocos durante el embarazo de forma natural. Algunas plantas medicinales tienen ciertas propiedades que pueden ayudarte a regular la temperatura corporal de forma natural y aliviar los golpes de calor. Pero sobre todo ármate de paciencia.
Síndrome de los pies calientes en el embarazo
El llamado
síndrome de los pies calientes es una molestia ligada a los sofocos y golpes de calor. En la mayoría de los casos, se caracteriza por un dolor sordo en la planta y los dedos de los pies y sensación de quemazón causado porque los huesos metatarsianos están comprimidos y problemas de circulación. Es importante llevar
calzado cómodo con una suela transpirable y blanda y hacer masajes en las piernas y en los pies al final del día.
No dudes en
consultar a tu médico cualquier duda que tengas sobre el
tratamiento de los pies calientes en el embarazo.