Como ya sabrás, el líquido amniótico es el fluido transparente y acuoso que rodea al embrión a partir de la semana 4 del embarazo y que protege al bebé contra golpes y lesiones, además de regular su temperatura durante toda la gestación. Sufrir pérdidas de líquido amniótico en el primer trimestre puede ser síntoma de alarma, por lo que es importante saber detectarlas a tiempo, diferenciarlas de posibles pérdidas de orina y acudir inmediatamente al hospital si se observa cualquier tipo de pérdida. Pero, ¿cómo saber si estás perdiendo líquido amniótico en el primer trimestre del embarazo? Sigue leyendo para conocer la respuesta.
Cómo reconocer las pérdidas de líquido amniótico en el primer trimestre
A lo largo del primer trimestre del embarazo, el líquido amniótico es un ultrafiltrado del plasma sanguíneo de la mamá y, a partir de la semana 12 del embarazo, la orina del bebé hace que aumente su cantidad. En general, las pérdidas de líquido amniótico en el primer trimestre del embarazo son sinónimo de un aborto espontáneo, por lo que es importante acudir inmediatamente al hospital en caso de que notes restos de flujo marrón o verde en tu ropa interior. Acude a urgencias si estas pérdidas van acompañas de molestias abdominales o fiebre.
En ocasiones, estas pérdidas se confunden con la orina. Solo en estas situaciones, no deberás preocuparte, ya que es normal tener pérdidas de orina en las primeras semanas del embarazo.
Pese a todo, si crees perder líquido amniótico en el primer trimestre, lo ideal es que lo consultes con tu médico. Nadie mejor que él podrá asesorarte y resolver todas tus dudas sobre cómo saber si pierdes líquido amniótico en el embarazo. Además, es posible que estas pérdidas se deban al proceso de anidación del embrión y, por tanto, el embarazo puede seguir adelante sin complicaciones.
