Sabemos que con la llegada de tu bebé, los gastos en casa crecerán más de lo imaginado. Tranquila con este detalle, siempre hay formas de acortar ligeramente el presupuesto sin tener que privar a tu pequeño de lo escencial.
La leche es el alimento básico del recién nacido, por eso lo ideal es amamantarlo durante el primer y hasta segundo año de desarrollo. Si en caso no pudieras hacerlo recurre a la leche de fórmula en polvo que es la más económica; lugares de mayoreo como Sam's Club o Costco son algunas referencias donde puedes acudir para reducir los costos, hacerte de cuponeras para las ofertas del mes también te será de utilidad.
En cuanto a los pañales te aconsejamos suscribirte a páginas internet que te faciliten cupones para descuentos. Cuando hayan ofertas puedes aprovechar en adquirir una buena cantidad de estos productos, según el periodo de crecimiento de tu bebé. Los pañales de tela son una buena opción de ves en cuando, pero como sabemos que no son nada prácticos para lavarlos, quizá solo te sirvan por algún tiempo.
El dolor de cabeza de todas las madres y en especial de las latinas solas en los EE.UU, es elegir a quién cuidará de su bebé. Pues bien, lo primero es que tú y tu pareja aprendan a organizarse cuando necesites salir de casa, la ayuda de amigas cercanas o de algún familiar cercano puede auxiliarte durante algunas horas, pero si necesitarás a una cuidadora por más tiempo considera contratar a una niñera ocasional, que sea de preferencia recomendada por una persona de tu confianza.
