El cuerpo de una embarazada sufre numerosos cambios y transformaciones a lo largo de los trimestres del embarazo para proteger al feto lo máximo posible. Además, también es frecuente sufrir diversas molestias asociadas al embarazo, como por ejemplo molestias hepáticas, es decir, una mujer embarazada puede tener dolor de hígado o sufrir alguna enfermedad hepática estando embarazada (hepatitis vírica aguda, toxicidad hepática por fármacos, cálculos biliares...).
Pero además, existen determinadas enfermedades hepáticas características del embarazo que suelen manifestarse durante la gestación, aunque desaparecen tras el parto. No es muy común padecer enfermedades hepáticas durante el embarazo que causen dolor de hígado, pero si sientes cualquier tipo de molestia en el abdomen derecho o en el área gástrica, debes acudir al médico.
Posibles causas del Dolor de hígado en el embarazo
Existen varias
razones por las que una mujer embarazada puede padecer dolor de hígado. El dolor hepático puede aparecer debido a la
presión del útero en los órganos cercanos, aunque si se trata de un dolor persistente, la causa puede ser una
enfermedad hepática (hígado graso agudo, colestasis intrahepática del embarazo, el síndrome HELLP, hepatitis,
preeclampsia),
por eso es importante que visites a tu médico o ginecólogo para iniciar un tratamiento lo antes posible para evitar complicaciones no deseadas.
Advertencia
Acude rápidamente al médico si sufres un dolor intenso y prolongado en el hígado, porque puede estar causado por problemas hepáticos.
Tratamientos para aliviar el Dolor de hígado
El
dolor hepático sufrido durante el embarazo puede combatirse con
analgésicos para ayudar a aliviar la molestia en la región abdominal. Los
antihistamínicos también pueden ser prescritos para reducir los picores derivados de la colestasis intrahepática, pero siempre
recetados por un médico.
aliviar el Dolor de hígado de forma natural
Remedios para aliviar el Dolor de hígado en el embarazo
Para aliviar el dolor de hígado durante el embarazo, puedes poner en práctica estos remedios naturales y caseros, como consumir mucha, mucha agua para ayudar con la limpieza del hígado; comer verduras de hoja verde, como la col, las acelgas, las hojas de mostaza, etc., y frutas como la papaya. Además, el ajo, gracias a sus propiedades anti-hongos y anti-inflamatorias, mejora la digestión y el funcionamiento hepático. Tomar leche de vaca o de cabra también es recomendable, así como el jugo de aloe vera.
