Antes de que el bebé llegue al mundo, sus padres han de preparar el vehículo de una forma correcta para poder realizar desplazamientos y viajes tras su nacimiento. Hay que tener en cuenta que el primer viaje que hará el recién nacido será, precisamente, el que le lleve desde la clínica hasta su casa.
Actualmente, los accidentes de tráfico se han convertido en la principal causa de muerte entre niños menores de 14 años. Y según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), 4 de cada 10 niños que perdieron la vida en las carreteras, no utilizaba ningún sistema de protección en el coche.
Por este motivo, los Sistemas de Retención Infantil se han convertido en armas infalibles para evitar las muertes en accidentes de tráfico. De hecho, se calcula que este tipo de sistemas de seguridad pueden reducir hasta en un 75% las muertes de niños en accidentes, y en un 90% las lesiones ocasionadas por estos accidentes.
Cuando nos convertimos en padres o madres, una de las cuestiones que más nos preocupa es la seguridad de nuestros hijos. Por ello, si quieres que tus viajes y desplazamientos en familia sean seguros, además de los Sistemas de Retención Infantil obligatorios, puedes contar con algún que otro elemento que os aporte un plus de seguridad en vuestros viajes.
En este sentido, y si quieres que los viajes con tu bebé sean más seguros, puedes preparar tu coche con las rejas Travall, que permitirán que tu hijo vaya más protegido en todos los trayectos.
Este tipo de rejas están fabricadas en acero templado, y diseñadas para cada marca y modelo de vehículo, con la finalidad de que siempre encajen a la perfección. Además, este tipo de sistema de seguridad evita que el equipaje situado en el maletero pueda saltar de forma inesperada tras un choque imprevisto o accidente.
Claves de seguridad en el coche
Si quieres viajar con niños pequeños en coche de una forma segura, sigue estos consejos y, ¡a disfrutar de esos viajes en familia!:
Antes de partir, procura realizar siempre una pequeña revisión al coche. Especialmente si vais a disfrutar de un trayecto largo, hay que comprobar que tanto las ruedas, como el aceite, el motor y los filtros del vehículo están en perfecto estado.
También es conveniente que revises que la sillita del bebé está perfectamente anclada al asiento. Has de recordar que ésta deberá ir colocada en el sentido contrario a la marcha hasta que tu hijo tenga, como mínimo, cuatro años de edad.
Comprueba también que la cabeza del niño no asome por encima del respaldo de la silla. En caso de que esto ocurra, deberás cambiar la silla por una de dimensiones superiores.
Aunque con el buen tiempo es probable que empiece a hacer más calor en el coche, lleva mucho cuidado cuando pongas el aire acondicionado, y evita que la salida del aire esté situada directamente hacia el bebé, pues de lo contrario podría pasar frío durante el viaje, y resfriarse.
Si vas a hacer un viaje largo, procura que las paradas sean cada dos horas. Estos descansos son convenientes para estirar las piernas, tomar algo de aire, o disfrutar de un pequeño refrigerio que te ayude a combatir el sueño y el cansancio.
Intenta entretener a tus hijos durante el viaje con juegos o canciones divertidas, y procura que éstos no abusen de los videos que pueden ver en el móvil o en tabletas portátiles. Trata de fomentar su imaginación en los viajes, y de esta forma, disfrutareis de un viaje en familia inolvidable.
