Si necesitas que una canguro se quede en casa con tus hijos porque tienes determinadas obligaciones laborales o familiares que cumplir, una de las primeras cuestiones que has de abordar es cómo ha de ser la entrevista que realizarás a las candidatas a canguro que pasen por tu proceso de selección.
Se puede decir que la entrevista es un punto fundamental a la hora de elegir a la canguro que cuidará de los niños durante nuestra ausencia. Por ello, debemos prestar mucha atención a las preguntas que formulemos, así como estar también especialmente atentos a las respuestas que recibimos.
Además de entrevistar a una canguro, es recomendable no sólo ceñirse a un breve cuestionario, sino también intentar ver a la canguro en acción, para comprobar así cómo se desenvuelve ésta con nuestros hijos, y qué cualidades especiales destacan en esa persona.
En este sentido, sería muy acertado que cuando entrevistases a una posible candidata a niñera, le solicites que pase un rato breve con tus hijos, jugando o charlando con ellos, para que puedas comprobar así si existe una buena conexión entre ellos y su futura cuidadora.
¿Cómo se debe entrevistar a una canguro?
Cuando entrevistes a las candidatas que se presentan al puesto de canguro que has ofertado, trata de elaborar un cuestionario en el que se aborden todos los temas que desees tratar en la entrevista. Te mostramos a continuación, agrupadas por categorías, cuáles son las 10 preguntas clave que deberías formular cuando entrevistes a una canguro.
Preguntas personales para conocerla más a fondo
Es importante que conozcas ciertos detalles personales sobre la niñera a la que vas a encomendar el cuidado de tus hijos. Por este motivo, a la hora de entrevistar a una canguro deberás preguntarle, por ejemplo
1. Cómo se definiría a nivel personal: ¿alegre, comprometida, positiva, responsable, organizada, resolutiva?
2. Qué habilidades considera que tiene para el cuidado de los niños.
3. Con qué actitud suele afrontar situaciones difíciles o imprevistas.
Preguntas sobre su experiencia profesional
La experiencia profesional previa que aporte una canguro es tu principal herramienta de seguridad a la hora de confiarle el cuidado de tus hijos. Por este motivo, has de preguntarle por:
4. Los puestos de trabajo que ha desempeñado anteriormente.
5. Si ha trabajado o no como canguro en alguna otra ocasión.
No olvides que para mayor seguridad a la hora de entrevistar a una canguro, debes pedir que aporte cartas de referencia sobre sus trabajos anteriores. En este tipo de documentos deben aparecer los datos de los empleadores para los que trabajó (sus nombres, direcciones de contacto y números de teléfono).
Preguntas sobre el puesto de trabajo
Antes de llevar a cabo la elección de una niñera, has de preguntarle en la entrevista cuestiones muy concretas sobre el puesto de trabajo que le ofreces, como por ejemplo:
6. Si puede o no asumir el horario que le propones.
7. Si está de acuerdo con el sueldo que ofreces y si estaría dispuesta a trabajar horas extra.
Recuerda siempre que la entrevista es un momento único para hablar, aclarar o consensuar todos aquellos aspectos concretos sobre el puesto de trabajo en cuestión, y que una vez hablados y pactados, éstos no se modificarán, pudiendo revisarse en un momento dado si es necesario y llegando a un consenso por ambas partes. Así evitaremos también posibles malentendidos.
Preguntas sobre situaciones concretas que se le pueden presentar
Al entrevistar a una canguro, es fundamental abordar también en tu proceso de selección algunas preguntas sobre situaciones domésticas muy concretas. Este tipo de cuestiones te servirán como una especie de simulacro real para conocer su capacidad de respuesta.
Algunas preguntas que podría incluir este cuestionario serían:
8. ¿Qué haría en caso de accidente o de una emergencia?
9. ¿Cómo calmaría el llanto prolongado de un bebé?
10. ¿Qué elementos son necesarios para bañar a un niño pequeño y qué medidas de seguridad se deben tomar?
Por descontado, puedes incluir aquí preguntas muy concretas sobre el caso particular de tus pequeños, como por ejemplo cómo interactuaría con un niño con déficit atencional, si es este vuestro caso, o si sabe administrar la dosis de insulina a un niño con diabetes que la necesite durante la sesión en que está bajo su cuidado.
