Aunque la higiene bucal es algo que tienes que tener siempre en cuenta, en el embarazo conviene prestarle especial atención. Los efectos de algunas hormonas (como la prolactina y los estrógenos) pueden propiciar la aparición de algunas molestias como la gingivitis, que puede causar inflamación de encías, sangrado y sensibilidad al calor y al frío. A partir del primer trimestre, estos problemas son más habituales.
Visita al odontólogo, él te dará unas pautas de higiene y te indicará si debes seguir algún tratamiento. No te olvides de realizar un cepillado adecuado y utilizar hilo dental para eliminar los restos de comida.