Una de las dudas más frecuentes entre las parejas que tratan de concebir es el hecho de saber cuándo es el mejor momento para realizar una prueba de embarazo. Hay que tener en cuenta que se trata de un momento muy especial y que el mero hecho de tener demasiado estrés y ansiedad puede dar un resultado erróneo. Por este motivo, es muy importante saber cómo elegir el momento más adecuado. Aunque la mayoría de las mujeres se suele quedar más convencida cuando lleva a cabo un análisis de sangre, son muchas las que optan por solicitar un test de embarazo, como los que se encuentran en www.lafarmaciadelbebe.eu, por ejemplo.
Hay que aclarar que, pese a que se realizan en la intimidad del hogar y sin un médico presente, cuentan con una alta fiabilidad, por lo que se puede recurrir a ellos sin problemas para salir de dudas. Lo que hacen estos test es detectar una hormona llamada gonadotropina coriónica (o lo que es lo mismo, hCG u hormona del embarazo) a través de una muestra de orina y su sensibilidad suele rondar los 20 mlU/mL (miliunidades internacionales por mililitro de orina). Siendo así, desde el momento en el que el embrión se implanta en la pared del útero se puede detectar la hormona, puesto que el organismo comienza a producirla al instante.
A la hora de llevar a cabo este tipo de test hay que diferenciar entre las mujeres que tienen un ciclo regular y las que no. Los test de ovulación sirven como detectores de esta característica y también para conocer los días fértiles, en que es más propicio tener relaciones sexuales con el objetivo de concebir.
Las mujeres que son regulares ovulan a mitad del ciclo, es decir, sobre el día 14. Siendo así, con que se retrase un día la llegada de la menstruación puede bastar para que los niveles de la hormona gonadotropina coriónica esté presente en el organismo y, por tanto, sea detectable con una muestra de orina. Lo mejor es no apurarse, pese a que hay test que aseguran poder dar el resultado real una semana después de la concepción. Al menos un día de retraso en la regla es lo más adecuado. En cuanto al momento del día, en realidad, da igual, pero se recomienda usar la primera orina de la mañana por tener una mayor concentración.
Por su parte, las mujeres que tienen un ciclo irregular lo tienen un poco más complicado para saber cuál es el mejor momento para hacer un test de embarazo. Es preferible dejar hasta una semana de margen desde el momento en el que estaba previsto que bajara el periodo y, si aún no ha llegado, hacer el test.
Aunque se haga una prueba de embarazo y ésta dé negativo no quiere decir, automáticamente, que no se esté embarazada. Incluso cuando hay un leve sangrado (que se denomina sangrado de implantación y que dura unos tres días y es de color más amarronado) puede haber un embarazo. Es posible que los niveles de hCG aún no sean lo suficientemente elevados como para que el test lo detecte y se requiera hacer la misma prueba tres o cuatro veces. En caso de duda, lo mejor es acudir a un médico.
