La placenta previa o baja es una de las complicaciones más típicas del embarazo y se debe a una inestabilidad del útero.
Los casos de placenta previa pueden presentarse en todo tipo de embarazadas.
Aunque los últimos estudios apuntan que se incrementan los riesgos en los grupos de mujeres que señalamos a continuación:
- Tener cicatrices uterinas debido a otras intervenciones como una cesárea en un embarazo anterior o otro tipo de cirugía.
- Ser una embarazada con más de 35 años.
- En el caso de los embarazos múltiples, dado el peso de los pequeños.
- Tener antecedentes en tus embarazos anteriores de placenta previa o baja.
- Tener una mayor necesidad de oxígeno y como consecuencia de ello, una mayor superficie placentaria. Se puede dar en ciudades o poblaciones de una gran altitud o en fumadoras.