Muchas mujeres para eliminar el dolor pélvico u otras molestias pueden pensar en aplica calor sobre el vientre, pero ¿es perjudicial aplicar calor sobre la barriga estando embarazada? Sí, el calor puede ser perjudicial para el feto, sobre todo cuando la madre está comenzando el embarazo. En el primer trimestre del embarazo el calor excesivo puede ser negativo, debido a que puede ocasionar problemas en el tubo neural e incluso un aborto espontáneo.
¿Es negativo aplicar calor en el vientre durante el embarazo?
Los obstetras recomiendan a las embarazadas que no se sometan a altas temperaturas debido a que esto le puede ocasionar daños a ella y al feto. Las mujeres en gestación no deberían superar una temperatura mayor a 39 grados centígrados. Las altas temperaturas pueden ocasionar complicaciones en el embarazo y problemas en la formación del feto.
La aplicación del calor directo en la barriga en las primeras semanas del embarazo y el resto de la gestación puede ser interferir en el correcto desarrollo del feto. Se han descrito defectos en el área del tubo neural por esta causa. También es posible que el calor excesivo desencadene un aborto espontáneo.
¿Si estoy embarazada debo evitar el calor?
Sí debes evitar el calor en el embarazo, te damos varias razones a continuación. Primero por tu cuerpo no es tan tolerante a las altas temperaturas y puedes sufrir de deshidratación y golpes de calor. Y segundo porque hace daño tu hijo. Por eso, es importante que evites estas situaciones:
- No debes ir a saunas cuando estas esperando un bebé, ya que en los salones de saunas se alcanzan temperaturas muy altas.
- Podrás tomar baños con agua tibia, sin embargo, debes estar atenta a no exagerar con el agua caliente ya que te puede ocasionar daños en el abdomen.
- Es común usar fomentaras o almohadillas eléctricas cuando tenemos un dolor. Pero, tu debes evitarlas, en especial si debes ponerla sobre tu abdomen o pelvis. Estos elementos hacen el mismo efecto dañino que un sauna y baños con agua excesivamente caliente.
- Solicitar una baja laboral o un permiso especial, en el que percibas una prestación por embarazo de riesgo si estas expuesta a altas temperaturas allí.