¿Es normal tener hipersensibilidad en los pezones?

La lactancia materna es una de las imágenes que más ternura produce. Eso sí, aprender cuál es el procedimiento adecuado y perfeccionar la técnica por parte de la madre y del recién nacido lleva su tiempo. En ese transcurso pueden surgir algunas molestias. Si alguna vez te has preguntado “¿es normal tener hipersensibilidad en los pezones?” o “¿El picor es común cuando das de amantar?” te invitamos a conocer algunas de las causas y los remedios asociados al dolor de senos.

Sigue leyendo las principales recomendaciones para dar el pecho y descubre los múltiples beneficios de la lactancia tanto para el bebé como para la madre.

Romanova Anna

Es absolutamente normal tener hipersensibilidad en los pezones cuando empezamos a dar de el pecho a un bebé recién nacido, pero con el paso del tiempo y los cuidados adecuados, puedes conseguir disminuir el problema hasta eliminarlo. En la mayoría de las ocasiones, un simple cambio de posición del peque alivia el picor de senos durante la lactancia materna.

Causas de la hipersensibilidad de los pezones

Para solucionar este tipo de molestias descubre cuatro de las causas de la hipersensibilidad en los pezones y elude algunos de los errores propios de las mamás primerizas.

1. Si tanto tú como el recién nacido os acostumbráis a una misma posición o a una mala postura seguramente repercutirá en el buen estado de tus senos. No hablamos de un única postura, existen varias para poder vaciar la leche de cada pecho y que los pezones no se resientan. Aprende a colocar al bebé y guiarlo para que sepa cómo hacerlo.
2. Una de las causas más comunes de la hipersensibilidad en los pezones es la poca preparación previa o inexistente de los pezones, así como, el cuidado inadecuado de los mismos durante la época en la que se alimenta el bebé.
3. La higiene del pecho y de las manos de la madre son imprescindibles para adquirir una buena rutina a la hora de amamantar. Lávate las manos cada vez que vayas a darle el pecho al peque y para cuidar la higiene de tus senos, es recomendable una ducha diaria. No es necesario lavarse con agua y jabón los pechos tras cada toma.
4. Es muy importante que tanto el padre como el resto de familiares, ayuden a la madre con otras tareas, para apoyarla y que se despreocupe de estos temas. De esta manera, evitamos que el trabajo extra o el estrés interfiera en la lactancia materna.

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Consejos para evitar la hipersensibilidad en los pezones

El picor de senos, la hipersensibilidad, la infección… olvídate de la sensibilidad de los pezones tras el embarazo y alimenta a tu bebé con la leche materna sin preocupaciones. Para ello, hemos recopilado una serie de consejos básicos, toma nota:

1. Infórmate y lee sobre la lactancia durante la etapa del embarazo, para dar de amamantar a tu hijo de la mejor manera.
2. Comienza a dar el pecho inmediatamente después del parto.
3. Aprovecha en esta primera toma, si estás en el hospital para preguntar y resolver todas tus dudas de la mano de un especialista en lactancia materna.
4. Cuida tus pechos y pezones, antes del embarazo, durante y después, contribuyendo así a la preparación de los mismos para no tener problemas cuando el pequeño se alimenta.
5. Evita los sujetadores hechos de telas sintéticas y escoge aquellos realizados con algodón que son más delicados y adecuados cuando tenemos problemas en la piel, además, contribuyen a prevenir la sudoración.
6. Utiliza los productos hidratantes recomendados por tu doctor, en estas ocasiones, usar aceites naturales o otros jabones pueden influir y resecar la piel en esta zona.

En algunos casos, los bebés mastican o muerden los pezones cuando empiezan a salirles los dientes. Para solucionarlo, puedes ofrecerle algo frío antes de darle de mamar, para que le calme.

Lee más detenidamente las preguntas más frecuentes de la lactancia materna y sobre la sensibilidad de los pezones.

Es muy importante tener en cuenta que la alimentación de un bebé es cuestión de aprendizaje, y cuesta entre 2 y 3 semanas acostumbrarse a la rutina del amamantamiento. Una vez dominada la técnica y a medida que ambos, la madre y el recién nacido aprenden, estas molestias propias de la lactancia materna desaparecerán con el tiempo.

Si los problemas asociados a la hipersensibilidad en los pezones continúan no dudes en consultar a un profesional y seguir sus indicaciones médicas. Un especialista te ayudará a poner un remedio más drástico que haga menguar estas molestias y te dará consejos para amamantar al bebé de una manera eficaz y saludable.

Esperamos haberte ayudado a descubrir algunas de las dificultades que pueden presentarse en la lactancia materna como la hipersensibilidad en los pezones, y cómo resolverlas.