Llevar un bebé en el vientre es algo maravilloso. Una experiencia que no se puede a comparar con nada. Si estás embarazada estás viviendo uno de los momentos más importantes de la vida, pero no por ello esta etapa está exenta de ciertas molestias como los calambres en el embarazo. Descubre los tipos de calambres y cómo prevenirlos.
Olena Yakobchuk
¿Qué son los calambres?
Durante el embarazo, el crecimiento del útero puede presionar algún nervio y esto hace más frecuentes los calambres.
Son movimientos involuntarios de los músculos del cuerpo. Estas molestias son habituales durante el periodo de gestación y están relacionados con la fatiga y el cansancio.
El dolor producido por la tensión muscular puede llegar a ser bastante intenso interrumpiendo el sueño de la futura mamá, que justamente hacia finales del embarazo es difícil de conciliar.
Las mujeres que padecen calambres antes del embarazo son más propensas a que les ocurra a lo largo de la gestación. Se producen principalmente durante la noche, cuando el cuerpo está en estado de relajación y son más frecuentes en el segundo trimestre de la gestación.
Tipos de calambres en la gestación
Como decíamos estos movimientos involuntarios pueden producirse en los músculos de las diferentes partes del cuerpo. Veamos, en este sentido, qué tipos de calambres existen:
- Calambres en el bajo vientre durante el embarazo: a partir del segundo trimestre es frecuente y normal que aparezca un dolor muy intenso en la región del bajo vientre cuando se cambia de posición, generalmente en uno de los lados. Este dolor provoca miedo por pensar que está relacionado con contracciones uterinas pero que no lo son. Su causa es la aparición de calambres en los músculos abdominales, especialmente los oblicuos inferiores. Esto se producen por los cambios en la pared abdominal provocados por el crecimiento del abdomen en gestación.
- Calambres en las piernas durante el embarazo: es común tener hinchazón en las piernas durante el periodo de gestación porque el útero crece y ejerce presión sobre los vasos sanguíneos que llevan de regreso la sangre desde las piernas al corazón. Para remediarlo, la mejor manera de que pase el dolor y el músculo se relaje es estirar bien la pierna trayendo hacia ti los dedos de los pies, así trabajas el músculo en sentido contrario y poco a poco se expande.
- Calambres en el útero durante en el embarazo: son dolores muy parecidos a los que se pueden sentir durante la menstruación. Este tipo de calambres sin regla pueden estar anunciando un posible embarazo. El útero comienza a prepararse para el rápido crecimiento del embrión, que comienza con la implantación, por este motivo ocurren estas molestias.
¿Cómo prevenir los calambres?
Los diferentes tipos de calambres durante el embarazo son habituales y pueden prevenirse. Para evitar su aparición es importante que:
- Cuides la postura que adoptas, evitando sobrecargar las extremidades.
- Camines todos los días unos 30 minutos.
- Utilices zapatos sin tacón.
- Bebas mucha agua para evitar la retención de líquidos, responsables de la hinchazón de las piernas.
- Realices estiramientos siempre que hayas pasado mucho tiempo en una misma postura. Los ejercicios de elongación son muy beneficiosos antes de irse a dormir.
- Realices masajes suaves en las zonas afectadas.
- Te des duchas de agua fría.
En ocasiones, los calambres durante el embarazo se deben a una deficiencia de vitamina B6. Si los episodios de calambres son muy frecuentes, tu médico podría recetarte un suplemento con esta vitamina, acude a su consulta y explícale como te sientes.
Por tu parte puedes comer plátanos, ricos en magnesio y potasio porque favorecerán que no aparezcan los molestos calambres en el embarazo.
