Cómo sobrevivir al primer día después de la baja maternal

El fin de la baja de maternidad ha llegado, hemos apurado los meses de lactancia, incluso algunos días más de vacaciones para dedicarlos por completo al bebé y a ti, pero toca saber cómo sobrevivir al primer día después de la baja maternal.

Quedan muy pocos días y, vuelta a la rutina de trabajo, a incorporarse de nuevo a la jornada laboral y dejar atrás todo ese tiempo en el que has conectado todo lo posible con el bebé que llegó a tu vida para cambiarla por completo. Aunque algunas madres se puedan sentir aliviadas por dejar de cambiar pañales cada dos horas, estar pendientes de las horas de comida del bebé y de sus rutinas de sueño, lo cierto es que el primer día después de la baja de maternidad es muy duro, pues se la conexión o el vínculo que se ha forjado entre madre e hijo es algo que supera todas las barreras.

Para otras, la cruda realidad se acerca, no saben cómo dejar a sus primogénitos tantas horas alejados de ellas, sin saber si están atendidas todas sus necesidades con la persona que se queda con ellos, surge la ansiedad, las inseguridades y la falta de concentración en el trabajo.

Sea cual sea tu situación, tras el embarazo y el parto lo cierto es que ese primer día después de la baja de maternidad siempre es complicado de asumir por el motivo que sea, y por ello queremos ayudarte a superarlo con una buena nota a través de estos tips para saber cómo sobrevivir el primer día después de la baja maternal.

Consejos para superar el primer día después de la baja de maternidad

Aunque seamos madres, también somos profesionales, y como tales, desarrollamos nuestros trabajos y los compatibilizamos con la maternidad. Pero toca volver, la rutina nos espera y para hacer más llevaderos los comienzos, mejor seguir una estos tips:

• Podemos pedir la reducción de la jornada laboral al menos en los primeros meses de incorporación si nuestro bebé necesita más atención o la persona que nos ayuda no puede hacerse cargo de nuestro hijo tantas horas.
• Dejar leche preparada la noche antes para que la persona que cuida a nuestro bebé pueda dársela en el momento en que no nos encontremos en casa porque estamos trabajando. Si es posible, podemos darle el pecho en la oficina si ésta se encuentra cerca de casa dado que existe la posibilidad de solicitar el permiso de lactancia materna o si la persona nos puede llevar al bebé en la hora precisa. Son varias las claves que puedes seguir para volver al trabajo sin abandonar la lactancia materna, entre ellas se recomienda optar por tu hora libre para poder dar el pecho a tu bebé.

• No sentir que somos malas madres por dejar a nuestros hijos de pocos meses de vida con otras personas mientras nosotras volvemos a trabajar. Como seres humanos independientes, tenemos el derecho a contribuir a la economía familiar e incorporarnos al trabajo sin, por ello, descuidar ningún aspecto de nuestra vida personal.
• Aunque el primer día después de la baja de maternidad nos cueste, sentiremos un poco de alivio de tener contacto humano más allá de las tareas que ocupan cuidar al bebé. Volver a hablar de temas de trabajo que son tu fuerte te pueden aportar un equilibrio emocional que te puede ayudar a mejorar como madre cuando vuelvas a casa.
• Si en la oficina hay otros padres, ya puedes tener tema de conversación en la hora el café o en el almuerzo. Podréis compartir intereses y curiosidades para así, mejorar en cualquier aspecto que necesitéis.

Nadie dijo que fuese fácil, pero ser madre no es un trabajo a tiempo completo, o al menos no debe serlo. Compatibilizar la vida laboral y personal es posible y no debemos sentirnos tristes o mal por comenzar de nuevo a trabajar tras la baja maternal. ¡Ánimo y a por todas!