4 Tipos de anemia en el embarazo

Si vas a ser mamá por primera vez puede que te pille de sorpresa si te diagnostican anemia en el embarazo. Empieza por saber que es uno de los problemas más frecuentes entre las gestantes y que hay 4 tipos de anemia en el embarazo, prácticamente todos ellos inofensivos para ti y para tu bebé, sin embargo si lo padeces debes de cuidarte..

Es normal que te estés preguntando a qué se debe la anemia en el embarazo. Piensa que en este momento tu sangre está sufriendo una serie de transformaciones. La más importante es que aumenta considerablemente el volumen sanguíneo, lo que implica una disminución de la concentración de hemoglobina, la proteína rica en hierro que permite el transporte de oxígeno. El nivel de ese descenso, determina si hay o no anemia en el embarazo.

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¿Cuándo se considera anemia en el embarazo?

La definición de la anemia en el embarazo tiene que ver con esos niveles de glóbulos rojos. Hay distintos valores de la anemia en el embarazo, si han descendido por debajo de los 11g/dl según la OMS ya se puede considerar que existe anemia en las mujeres embarazadas. En este primer escalón afecta entorno al 50% de las gestantes, aunque sólo se empieza a considerar grave por debajo de 7g/dl.

Los síntomas de la anemia en el embarazo suelen ser el cansancio y la fatiga excesivos, algo de palidez en el rostro, la somnolencia, la apatía y cierta inapetencia. Ocasionalmente forman parte de los síntomas de la anemia en el embarazo otras molestias como los mareos, la sudoración, la ansiedad o la taquicardia y los dolores de cabeza.

Sí, afecta la anemia en el embarazo y es posible que aumente tu irritabilidad y falta de concentración. Es menos frecuente pero hay mujeres que notan una caída del cabello o las uñas más frágiles. También, dificultades respiratorias al hacer algún mínimo esfuerzo físico.

Si padeces los síntomas de la anemia y tu especialista te ha confirmado que tienes esta molestia o afección en la gestación, es interesante que tomes nota de la dieta para embarazadas con anemia que pueden ayudarte a equilibrar tus valores de la anemia en el embarazo.

Recuerda que tan importante es conocer los alimentos que pueden ayudarte así como aquello que evitan la absorción de hierro, conoce los 5 alimentos prohibidos para embarazadas con anemia y no los olvides.

Respecto a las causas de la anemia en el embarazo son de distinta índole, dando lugar a distintos tipos de anemia en el embarazo, como veremos a continuación.

Clasificación de la anemia en el embarazo

Como ya hemos señalado, las causas de la anemia en el embarazo tienen diferentes orígenes y dan lugar a modalidades diferentes de esta afección.

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La mayor parte de las veces, cuando se considera anemia en el embarazo es porque la mujer tiene una mayor cantidad de sangre, un aumento de hasta el 50% y los glóbulos rojos están más diluidos en ella. Pero, puede ser que el embrión consuma el ácido fólico en el embarazo de la madre.

Otras causas de la anemia en el embarazo son de orden genético o por deficiencias de vitaminas, la B12, o nutrientes como el hierro. Un último detonante es el de la pérdida abundante de sangre. En función del motivo que provoca esta deficiencia se asigna un tratamiento de anemia a la embarazada para combatirla.

Teniendo en cuenta estos supuestos, esta es la clasificación de la anemia en el embarazo:

1. 1. Anemia gravídica o también llamada anemia fisiológica del embarazo. esta es uno de los 4 tipos de anemia en el embarazo es la asociada al propio embarazo. Si no se desciende de los 11g/dl se considera normal y no se proporciona ningún tratamiento, salvo los controles analíticos correspondientes.
   2. Anemia ferropénica. Los niveles de hierro de la madre son menores a los valores normales. Puede ser porque los depósitos de hierro son insuficientes o porque se produce una mala absorción de este mineral. Es la anemia en las mujeres embarazadas más común, sobre el 90% de los casos.
   3. Anemia megaloblástica. Se produce por un déficit de ácido fólico o de vitamina B12, ambas sustancias implicadas en la formación de los glóbulos rojos. Es la menos habitual. Podría ser más problemática para el bebé por la carencia de ácido fólico, pero si se detecta es fácil de tratar.
   4. Anemia drepanocítica. Con ella cerramos los 4 tipos de anemia en el embarazo, de origen genético, la mujer ya la padece previamente a la gestación.

En cualquier caso, lo que debes tener presente es que, incluso en los supuestos más severos, cualquiera de los tipos de anemia en el embarazo tiene tratamientos sencillos y eficaces que palían rápidamente las posibles secuelas de esas deficiencias. Sólo debes ser regular en tus analíticas porque es la mejor forma de detectarla enseguida.