Los cuidados no terminan con el nacimiento de tu bebé. Debes seguir prestando atención a tu salud en el posparto, en especial a tu tensión arterial. Aquí te mostramos todo lo que debes saber sobre la tensión alta después del parto, su aparición, síntomas y la evolución.
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¿Qué es la tensión alta después del parto?
Estadísticas mundiales muestran que entre el 6 al 10% pueden tener la tensión alta en el embarazo. Lo usual, es que este problema se resuelva a las pocas horas de ocurrir el parto. Pero, no siempre sucede así.
En algunas oportunidades los niveles altos de la tensión arterial permanecen por semanas luego del nacimiento del bebé. La fecha de corte es la sexta semana del postparto. La hipertensión gestacional, la preeclamsia y la eclampsia deben desaparecer en esta fecha. Si esto no sucede hablamos de hipertensión crónica.
¿Cuáles son los síntomas de la tensión alta después del parto?
Lo más importante que debes recordar es medir tu tensión arterial a diario. Esta es la única forma con la que puedes garantizar que las cifras se encuentran dentro de la normalidad.
Especialistas recomiendan que sea con un esfigmomanómetro o tensiómetro manual, ya que muchos de los automáticos no están calibrados para este periodo. Quizás veas esto como un problema, porque deberás acudir con alguien que sepa usar este artefacto. Pero, piensa que solo serán 6 semanas, no más. Incluso, si todo va bien será sólo por algunos días.
La hipertensión arterial es en su mayoría asintomática. Por eso, la importancia de vigilar sus niveles a diario. Sin embargo, en algunas oportunidades puede dar síntomas, como estos:
- Dolores de cabeza frontales, occipitales o en alguno de sus lados que no ceden con analgésicos.
- Problemas visuales: visión borrosa, sensación de observar moscas o halos de luz.
- Náuseas y vómitos.
- Hinchazón súbita de las manos, pies o rostro.
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¿Qué ocasiona la tensión alta después del parto y cómo evoluciona?
La hipertensión postparto ocurre comúnmente en las mujeres que hayan sufrido de preeclamsia, eclampsia o hipertensión gestacional en el embarazo. También es común en las que tienen hipertensión arterial. Pero, por causas que aún no se identifican, las mujeres que hayan tenido un embarazo normal también pueden presentar este problema.
Entre el día 3 al 6 luego del parto es común ver las cifras de tensión alteradas, sin que esto sea anormal. El aumento de los líquidos corporales, la descarga hormonal, el dolor y otros cambios fisiológicos pueden elevar un poco la presión.
Ahora, si superado el día 6 tras el nacimiento del niño la tensión permanece alta es un problema. Según el valor de la presión arterial necesitarás o no medicamentos para tratarla, pero, siempre hay que controlarla.
Cuando está por encima de 160/100 mmHg el tratamiento farmacológico está indicado. Por debajo de este nivel, en especial si es asintomática, es posible que tu médico solo sugiera el control.
Existen también casos reportados de preeclampsia y eclampsia de aparición tardía. Estas inician la sintomatología después del nacimiento del niño y resultan igual de peligrosas, incluso cuando ya ha culminado el embarazo.
Esto quiere decir que, después de que nazca tu bebé necesitas mantener vigilada tu tensión arterial. Recuerda que un embarazo sin complicaciones no es garantía para no sufrir de tensión alta después del parto.
Cuando este problema permanece más allá de las 6 semanas luego del parto es posible que sea porque sufres de hipertensión crónica. En este caso, deberás acudir a un seguimiento médico a largo plazo y seguir todas sus indicaciones.
La hipertensión arterial no tratada puede dañar órganos tan importantes como el riñón, la retina, y el corazón. Por eso, es crucial tenerla bajo control.
- Martínez R., Redón A, Gallego C., Chagüendo J. (2017) Hipertensión/preeclampsia postparto, Recomendaciones de manejo según escenarios clínicos, seguridad en la lactancia materna, una revisión de la literatura. Rev. chil. obstet. ginecol. vol.82 no.2
