Tomar medicamentos en el embarazo puede ser un tema difícil para las madres, ya que pueden encontrarse frente a una situación en donde no saben si su tratamiento puede traer consecuencias al bebe dentro de su vientre. Existen ciertas circunstancias, donde el médico debe prescribir que medicamentos tomar en el embarazo, ya sea para tratar alguna complicación del embarazo, una dolencia o enfermedad activa.
Recomendaciones para ingerir medicamentos durante el embarazo
Antes de saber cuándo es recomendable tomar medicamentos en el embarazo, debemos recordar que para tomar cualquier fármaco en tu estado, este debe ir prescrito por el médico tratante. Existen riesgos de tomar medicamentos en el embarazo, por ello poseen una clasificación dada por la FDA, que los agrupa de acuerdo al riesgo de producir malformaciones fetales y efectos nocivos durante la gestación, por eso es indispensable conocerla antes de tomar algún tratamiento. A continuación expondremos algunas de las situaciones donde es recomendable tomar medicamentos en el embarazo siempre con consentimiento del especialista.
Dolores
Una forma de tratar el dolor durante el embarazo, es tomando analgésicos, el paracetamol o acetaminofén son los ideales, ya que son efectivos y no poseen efectos adversos en el feto. Los AINES pueden consumirse solo durante los primeros meses del embarazo.
Infecciones urinarias
Las infecciones urinarias requieren del uso de antibióticos durante el embarazo. De acuerdo a la gestación donde se encuentre la madre, los antibióticos podrían variar, entre un trimestre y otro. Se debe atender a tiempo y de manera oportuna, para evitar que esta infección evolucione a una sepsis desde punto de partida renal. También se puede tratar con óvulos vaginales u otros medicamentos para ayudar eliminar la infección, tal y como ocurre con el uso del genurin en el embarazo.
Infección respiratoria
Según la gravedad y el agente causal, serán tratadas según se necesite. El uso de antibióticos está prescrito es esta situación, también el uso de algunos jarabes o pastillas para calmar la tos se encuentra aprobado.
Resfriado
Para tratar el resfriado en el embarazo, se puede tomar desde paracetamol para la fiebre, descongestionantes nasales y antihistamínicos para respirar mejor sin presentar algún riesgo para el embarazo.
Alergias
Las alergias durante la gestación, deben ser abordadas con antihistamínicos tales como la clorfeniramina, loratadina o la difenhidramina.
Asma
El asma es una enfermedad respiratoria crónica de carácter alérgico, no puede dejar de ser tratada ya que la falta de oxígeno puede llegar a ser perjudicial tanto para la madre como para el feto. El tratamiento consiste en emplear medicamento broncodilatadores, tanto inhalados, orales o por vía endovenosa. Se ha llegado a asociar los corticoides orales con retraso del crecimiento intrauterino, pero en casos de emergencia se debe valorar la relación riesgo beneficios del medicamento. Se ha demostrado que el tratamiento inhalado es bastante efectivo y no ha presentado problemas, pero toda madre debe ser valorada de manera individual para establecer el tratamiento para el asma en el embarazo.
Infección vaginal
Las infecciones vaginales en el embarazo, pueden ser producidas por hongos o por bacterias, en ambos casos se debe administrar el tratamiento oportuno, ya sea con antibióticos o con antifúngicos. De no tratar eficientemente una infección vaginal podría llevar a desarrollar parto prematuro.
Problemas gastrointestinales
La acidez estomacal es muy frecuente durante los primeros meses del embarazo, también puede llegar a observarse reflujo gástrico, gases y dolor de estómago. Por este motivo se recomienda ampliamente tomar antiácidos en el embarazo, especialmente los que contienen magnesio. Los antiflatulentos, como la simeticona son recomendados en el embarazo para tratar los gases.
Los laxantes o ablandadores de heces son empleados para tratar el estreñimiento, el cual es normal durante el embarazo.
Es recomendable tomar medicamentos en el embarazo cuando la situación lo requiera, en casos de enfermedad o dolencias pasajeras que requieran tratamiento inmediato para mejorar la calidad de vida de la madre.