Si eres mamá no te pierdas las claves del destete nocturno

Muchas madres han pasado por la misma situación. Una mezcla de sueño, cansancio, ansiedad, pena y sentimiento de culpa. Todo esto ocurre cuando comenzamos a dar el pecho por la noche a nuestro bebé y hoy te contamos las claves para afrontar la recta final de esta etapa de la mejor manera posible, toma nota de las claves del destete nocturno y amplía toda la información sobre el destete y la alimentación del bebé.

La toma nocturna no es más que la acción de dar el pecho a nuestro hijo por la noche mediante la lactancia materna, por lo que esta acción nos obliga a romper nuestra cadena de sueño continua, normalizada a 7/8 horas de sueño y atender las necesidades alimentarias del bebé.

Esta situación puede generar en la madre una situación de tristeza y malestar que puede ser más grave dependiendo de las circunstancias que la rodeen y del apoyo de la pareja en los momentos de lactancia nocturna.

Es por ello que, muchas mujeres prefieres recurrir al destete nocturno, o lo que es lo mismo, dejar de dar el pecho al bebé por la noche meses después del embarazo y antes de lo previsto para así acostumbrarlo a su futura vida durmiendo toda la noche seguida sin alimentarse.

Cómo eliminar la toma nocturna de leche materna

Son muchos los motivos que llevan a las madres a decidir destetar a su bebé. Lo mejor que debemos hacer es valorarlo previamente y consultarlo con nuestro médico especializado en maternidad, y cuando ya hemos madurado la idea, realizar el destete respetuoso poco a poco. Al igual que existen algunos consejos básicos, existen una serie de cosas que debes evitar al dejar de amamantar al bebé, descúbrelas.

Este siempre es el primer paso para realizar un destete completo, es decir, comenzar eliminando las tomas nocturnas para luego ir reduciendo las diurnas. Siempre hay que realizarlo de una forma respetuosa hacia el bebé y estas son las claves para conseguirlo.

1. Lo primero de todo es saber que, aunque realicemos la acción del destete nocturno, el bebé no dormirá toda la noche sin despertarse. El sueño es un proceso evolutivo y despertarse por la noche es algo normal, tanto si toma el pecho como el biberón.
2. Por otro lado, debemos respetar las necesidades de desarrollo del bebé. Esto se deriva en que el destete nocturno no debería llevarse a cabo antes de los 12 a 18 meses de vida del recién nacido. La leche materna es el principal alimento de un bebé a esa edad por lo que es aconsejado no realizarlo hasta pasado el año de vida.
3. Cuando hemos comenzado con el destete nocturno, poco a poco como hemos recomendado, debemos tener en cuenta también los sentimientos del bebé. Es normal que éste siente frustración y tristeza por perder un hábito en la alimentación del bebé al que ya estaba acostumbrado desde que nació.
4. Debemos tomarlo con calma y realizar un destete lo más respetuoso posible con nuestro hijo para que no se sienta triste por ello.
5. Otra acción que podemos realizar cuando comenzamos con el destete nocturno es ofrecerle una alternativa. Como bien apuntábamos, los niños se seguirán despertando cada cierto tiempo durante la noche para buscar alimento o ser atendidos, por lo podemos ofrecerle líquidos como leche o agua.
6. A un bebé que está iniciando el destete por la noche también debemos darle una dosis extra de mimos para que sienta que lo hacemos por su bien. La pérdida de la teta no siempre es bien recibida por lo que tenemos que hacer que se sienta lo mejor posible y que vea en nosotros un punto de apoyo para sobrellevarlo de buena manera.
7. Finalmente, también tenemos que tener en cuenta que, una vez iniciado el camino de destete, no podemos dar marcha atrás. Es altamente aconsejable no volver a realizar la rutina por la noche a no ser que sea estrictamente necesario y no podamos seguir por situaciones difíciles de afrontar.